Connect with us

Sociedad

Perdió a su abuelo y convirtió el dolor en amor: refugia adultos mayores abandonados y en situación de calle

Publicado

on

“El hogar de Cecilia”, en Merlo, cobija a 58 adultos mayores que vivieron en las calles de la provincia de Buenos Aires y sufren el abandono de sus familias. La mujer que para sanar su herida cambió la vida de quienes parecerían destinados a morir en la más completa soledad

Cuando Juan José Melano dejó la casa en la que vivía con su esposa, el corazón de Cecilia , su nieta, se llenó de tristeza. El hombre había juntado una muda de ropa, llamó a su perro y subieron a un coche viejo rumbo a una carbonera que hace 36 años funcionaba en el partido de Merlo. Allí vivió lo que pudo, como pudo y en soledad. Esos recuerdos aún entristecen a la mujer de 47 años.

Quizás un poco para cerrar esa herida y otro montón por el amor que tiene para brindar, desde hace casi 22 años (los cumple en octubre), Cecilia se dedica a rescatar adultos mayores que terminaron solos, en las calles, a los de bajos recursos, a los que fueron abandonados por sus familias, aquellos que están tirados sobre los cartones amontonados en alguna vereda y que para olvidar lo que sufren se escudan en el alcohol: “los fantasmas de la sociedad”, define con bronca.

“El Hogar de Cecilia” es hoy la casa de 58 abuelos y abuelas que comparten sus días en la localidad Libertad, en Merlo, provincia de Buenos Aires. Allí recibe a quienes deriva la policía cuando los encuentran solos, tras un aviso de alerta en las redes sociales o cuando algún vecino los encuentra en estado de abandono.

El refugio cambia la vida de quienes parecerían destinados a morir en la más completa soledad  (Ariel Timy Torres / Cristian Scotellaro / AFP)El refugio cambia la vida de quienes parecerían destinados a morir en la más completa soledad (Ariel Timy Torres / Cristian Scotellaro / AFP)

Cuando llegan los bañamos, los cuidamos y empezamos a hacer cadenas de mensajes, generalmente por las redes sociales, para ver si se encuentra a la familia, porque muchas veces son abuelos que salen a caminar y se pierden. Muchas veces la familia aparece, pero son familiares ausentes y no los retiran nunca; otras veces, la familia nunca aparece y se quedan a vivir con nosotros; y otra más, la familia aparece y al verlos tan bien no se los quieren llevar porque no les pueden pagar un geriátrico. Y así nuestra familia sigue creciendo”, resume Cecilia.

El lugar, que no es un geriátrico -aclara-, se solventa con donaciones y el aporte de personas solidarias que ayudan a las voluntarias a mantener la meta de cuatro comidas diarias y lo más importante: “Acá se le da todo lo que una persona necesita para vivir: amor. Quizás faltan un montón de cosas en infraestructura, pero lo principal lo tiene y es el cuidado, cariño, atención médica y contención; lo que la familia se olvidó de darle cuando lo dejaron abandonados”.

La historia

El refugio comenzó en el año 2001 con cuatro abuelos: Chocha, José, Rosa y Mima. “No sé si fue una idea o una asignatura pendiente que yo tenía con la vida o con mi abuelo… Mi abuelo tenía una posición económica muy buena y, por cosas de la vida, un día se peleó con mi abuela por mi tío, el hermano de ella y mi abuela prefirió a mi tío. Y se fue a la carbonera, un lugar grande que hacían carbones. Estaba solo y abandonado, y a los dos años murió”, recuerda entre lágrimas.

"Ellos son los fantasmas de la sociedad, los olvidados", lamenta Cecilia (Ariel Timy Torres / Cristian Scotellaro / AFP)“Ellos son los fantasmas de la sociedad, los olvidados”, lamenta Cecilia (Ariel Timy Torres / Cristian Scotellaro / AFP)

Tras ese dolor, el tiempo siguió su curso: creció y comenzó a estudiar enfermería y radiología, pero sentía que su deseo no iba por ese camino. “Pero nada de eso me llegaba. Hasta que encontré lo que era mío, estar con las personas de tercera edad”, admite y cuenta con dolor todo lo que vio en el tiempo que trabajó en un geriátrico de la zona oeste del Conurbano.

El nivel de maltrato que vi en ese lugar con los abuelos, nunca lo había visto en otro lado. Cuando yo estaba con ellos, todo era amor, pero cuando me iba pasaba lo peor: los bañaban con agua fría para que por el frío se durmieran. Por suerte los dueños murieron y el geriátrico cerró”, dice llorando y lamenta que cuando advirtió a los familiares de esas personas no le creyeron.

De ahí me pude llevar a dos abuelos, Chocha y José, luego de hablar con sus familiares, y conseguí otro hogar para trabajar, pero tampoco me llenaba. Nada lo hacía, hasta que un día mi papá me dio unas llaves y me regaló el alquiler de una quinta que tenía tres piezas, una cocina, un comedor y un montón de parque. Pusimos seis camas, un freezer, una mesa y una cocina, ahí empecé empecé a vivir y se mudaron conmigo dos abuelas que saqué de aquel geriátrico, Josecito tenía 90 años y pesaba 37 kilos”, recuerda afligida.

"El hogar de Cecilia" se sustenta de donaciones (Ariel Timy Torres / Cristian Scotellaro / AFP)“El hogar de Cecilia” se sustenta de donaciones (Ariel Timy Torres / Cristian Scotellaro / AFP)

Así comenzó la noble tarea: “La idea era hacer como un geriátrico, en su momento, pero después me di cuenta de que yo tenía muchas cosas por devolver a la gente y que no se lo había podido dar a él, a mi abuelo Gordo… Hoy lo veo en ellos y todo lo que hago es por ellos y por él”.

Muy emocionada, sentada sobre una de las camas de sus queridos abuelos a los que cuida como una madre, Cecilia cuenta que los 365 días del año se levanta por ellos, sin importar nada de lo que le pueda pasar. “Si tengo dolores, si estoy peleada con alguien o enojada con la vida, si estoy triste… Nada de eso importa, solo sé que tengo que estar acá y bien para ellos. No puedo permitirme de estar mal o de faltar un día”.

Esta decisión que asume cada día le costó y cuesta porque muchas veces no es comprendida. “A mí me costó mucho que mi familia entienda cómo yo puedo pasar más tiempo acá, acá hay 60 personas que me necesitan… Ellos me dicen ‘mamá’ porque yo los elegí como hijos, yo elegí tenerlos, elegí sacarlos de la calle. Yo estoy cuando tienen fiebre, cuando se pelean, cuando están tristes, por eso me dicen ‘mamá’”.

El refugio está en Libertad, Merlo (PBA)  (Ariel Timy Torres / Cristian Scotellaro / AFP)El refugio está en Libertad, Merlo (PBA) (Ariel Timy Torres / Cristian Scotellaro / AFP)

Su sueño, confía, es agrandar el hogar para que sus abuelos tengan mayor comodidad y anhela tener allí más gente para cuidar. Por esto, necesita donaciones para mejorar la infraestructura como también pañales, prendas de vestir, calzados, artículos e limpieza e higiene personal. También comida fresca y alimentos no perecederos.

“El mensaje que siento para dejar a la gente que vive con un abuelo, con un padre que ya sea mayor es que los cuiden, que los valoren, que los escuchen, que uno les puede curar el alma con amor. No hay mejor medicina que tener quien los cuide”, finaliza.

*Quienes quieran colaborar con Cecilia y los habitantes del refugio pueden comunicarse al mail refuguiomamacecilia@gmail.com (para donación de materiales, ropas, frazadas y pañales para adultos). En caso de ver a un adulto mayor en situación de calle o situación de urgencia, puede llamarla al 11 5923-1979

Comentá aquí

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Sociedad

Un turista de 21 años se metió al Río Paraná para buscar una pelota y murió ahogado

Publicado

on

Por

Ocurrió en el balneario municipal de Santa Elena. El joven habría cruzado la zona habilitada, que estaba delimitada por boyas

Un joven de 21 años murió ahogado este martes por la tarde tras adentrarse en las aguas profundas del río Paraná para recuperar una pelota. El trágico accidente ocurrió en el balneario Santa Elena, situado en la ciudad homónima, en Entre Ríos.

El cuerpo no ha sidoEl cuerpo no ha sido encontrado y la búsqueda continúa.

Si bien un compañero intentó ayudarlo, tuvo que soltarlo debido a que la víctima comenzó a arrastrarlo mientras se ahogaba. El joven fue identificado como Logan Daniel Videla, oriundo de La Matanza, provincia de Buenos Aires. En el caso intervinieron agentes de la Comisaría de Santa Elena, del Departamento La Paz, junto con personal de Prefectura Naval.

El trágico accidente ocurrió enEl trágico accidente ocurrió en Río Ceballos (Foto: Prensa Policía)

Alarmante cifra de ahogamientos durante el verano

Según se pudo reconstruir, al notar que no podía mantenerse a flote, comenzó a pedir auxilio. A pesar de los esfuerzos de una persona que logró sacarlo del agua, ya no presentaba signos vitales, según informó El Doce TV.

En lo que va del verano, las víctimas fatales sufrieron accidentes en las localidades cordobesas de La Calera (Sierras Chicas), Nono (Traslasierra), Villa Rumipal (Valle de Calamuchita), Villa Carlos Paz (Valle de Punilla), el dique Piedras Moras (Calamuchita), Mina Clavero (Traslasierra) y Río Tercero (Tercero Arriba).

Las autoridades locales y los organismos de emergencia suelen emitir recomendaciones para evitar accidentes en los cursos de agua. Entre las medidas más comunes se encuentran evitar ingresar a zonas profundas, prestar atención a las corrientes y no nadar en áreas no habilitadas. Sin embargo, los incidentes registrados este verano reflejan que, en muchos casos, estas advertencias no son suficientes para prevenir tragedias.
Un turista de 65 añosUn turista de 65 años falleció en La Toma.

Solo dos días antes de la muerte de Lucas Iván Paz, falleció otro hombre identificado como Horacio Quiroga en la ciudad de Río Tercero. La víctima, de 37 años, disfrutaba de una jornada familiar cerca del balneario municipal; cuando ingresó al agua en la zona del predio del Centro Tradicionalista alrededor de las 19 horas. Testigos relataron que, tras lanzarse al río, Quiroga no volvió a salir a la superficie, lo que generó alarma entre los presentes.

Ante la emergencia, las autoridades locales y los Bomberos Voluntarios acudieron rápidamente al lugar. Según detalló Telefe Córdoba, lograron rescatar al hombre y trasladarlo de inmediato al hospital de la localidad. Sin embargo, pese a los esfuerzos médicos, se confirmó su fallecimiento horas después. Habría sufrido un paro cardiorrespiratorio tras ingresar al agua.

Días atrás, un hombre de 65 años, identificado como Norberto Jorge Amadeo, falleció en el balneario La Toma, ubicado en la localidad de Mina Clavero. El turista, oriundo de la provincia de Buenos Aires, resbaló mientras intentaba cruzar el río a nado, golpeó su cabeza contra una piedra y fue arrastrado por la corriente, lo que resultó en su trágico deceso.

Seguir leyendo

Sociedad

Temporal en Bahía Blanca, en vivo: se reactivó el transporte público y será gratis por 30 días

Publicado

on

Por

La ciudad bonaerense vuelve poco a poco a la normalidad. El funcionamiento de los colectivos, la recolección de residuos y la entrega de donaciones. La atención al público en lugares habilitados para circular. Qué pasará con las clases y el clima

Bahía Blanca se reconstruye después del fuerte temporal que azotó a la ciudad el viernes pasado, provocando grandes daños y destrozos. La ciudad recibió la llegada del.

En el medio de la angustia que prevalece por las personas que aún están desaparecidas, incluyendo a las hermanas Delfina y Pilar Hecker, de uno y cinco años, las autoridades del municipio se mantienen trabajando en su búsqueda.

Por lo pronto las clases estarán suspendidas hoy y mañana debido a las complicadas condiciones de infraestructura en las que se encuentran las instituciones relevadas.

En tanto, el gobierno de la Provincia de Buenos Aires anunció un paquete de medidas como créditos blandos, subsidios, transporte gratis y beneficios impositivos.

Alfredo Dagna, presidente del Club Olimpo de Bahía Blanca: “El club está colapsado con las ayudas”
Alfredo Dagna, presidente del Club Olimpo, confirmó que suspendieron el fútbol en Bahía Blanca, para ayudar a la ciudad

El presidente del Club Olimpo de Bahía BlancaAlfredo Dagna, destacó la ayuda de gran parte de las instituciones deportivas de la Argentina: “Es un aluvión de donaciones que vienen. Me han llamado casi todos los presidentes de clubes para decirme que enviaban uno o dos camiones”. E informó que la idea es entregarlo “en forma inmediata” a la gente, ya que hay una situación de desesperación.

Respecto al rol de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA), Dagna comentó que el organismo se encuentra recibiendo donaciones en el predio de la AFA, en Ezeiza, que provienen de los clubes del interior. Y subrayó que lo que más se necesita son elementos de higiene: “El tema es lo que pueda pasar desde el punto de vista sanitario en la Ciudad”.

Alfredo Dagna, presidente del ClubAlfredo Dagna, presidente del Club Olimpo de Bahía Blanca

En cuanto a medidas, el dirigente relató: “En el fútbol lo que hicimos fue suspender el partido que teníamos ahora, jugábamos el domingo. Tengo dos helicópteros de la Policía Federal en la cancha de fútbol y suben y bajan todos los políticos que vinieronEl club está colapsado con las ayudas”.

Por último y sobre la situación actual en la localidad bonaerense, Dagna calificó al temporal como “una situación difícilmente de entender” y estimó que es poco probable que vuelva a suceder. “Son situaciones que uno las explica y las cuenta, pero el que las vive es una situación traumática porque pierde todo. Eso es como el Juego de la Oca, retrocedes 20 casilleros porque perdés todo. Hechos como estos desbordan cualquier previsibilidad posible”.

En este punto, concluyó: “Es dramático lo que pasó, de tal forma que, toda la ayuda que llega, si bien es un bálsamo para la gente, cuando pase la ayuda la gente va a tener que arrancar de cero. Y eso es lo más preocupante”.

10:28 hsHoy

Cómo están las rutas en Bahía Blanca

El desigual estado de lasEl desigual estado de las rutas en Bahía Blanca (Gustavo Gavotti)

Según informó Vialidad Nacional, el estado de las rutas nacionales que conectan la ciudad con el resto del país presenta diversas restricciones, incluyendo cortes totales y tramos transitables con precaución.

De acuerdo con el reporte oficial, la Ruta Nacional 3 (RN 3), muestra diferentes niveles de accesibilidad dependiendo del tramo. El segmento entre Azul y el empalme con la Ruta Nacional 229 (RN 229) se encuentra transitable sin inconvenientes. El tramo que conecta la RN 229 con El Triángulo y el que va desde este último punto hasta la calle Charlone (kilómetro 691) requieren precaución debido a las condiciones del camino.

Por otro lado, el tramo entre el Canal Maldonado (kilómetro 692) y el empalme con la Ruta Nacional 33 (RN 33) permanece completamente cerrado al tránsito.

Los trabajos para recuperar laLos trabajos para recuperar la circulación vial en algunos accesos a la ciudad de Bahía Blanca

El resto de los tramos de la RN 3 presentan una situación mixta. Desde el empalme con la RN 33 hasta el empalme con la Ruta Nacional 22 (RN 22), el tránsito es posible pero con precaución, mientras que el trayecto entre el empalme con la RN 22 y Patagones está habilitado sin restricciones.

Asimismo, el segmento que conecta el empalme con la RN 3 y Río Colorado, perteneciente a la RN 22, también es transitable con normalidad.

El pavimento resquebrajado, producto deEl pavimento resquebrajado, producto de las tormentas del viernes pasado

La Ruta Nacional 33 (RN 33) también presenta condiciones variables. El tramo entre el empalme con la RN 3 y La Vitícola está habilitado, pero se recomienda circular con precaución. Por su parte, el trayecto que conecta La Vitícola con Pigüé no presenta inconvenientes. Sin embargo, el tramo que une Pigüé con Trenque Lauquen requiere precaución debido a las condiciones del camino.

En cuanto a la Ruta Nacional 35 (RN 35), el panorama es más crítico. El tramo que conecta Bahía Blanca con el límite de la provincia de La Pampa se encuentra totalmente cerrado.

La Ruta 35, una deLa Ruta 35, una de las más afectadas por el temporal

Por su parte, la Ruta Nacional 228 (RN 228), que conecta Necochea con Tres Arroyos, está habilitada sin restricciones. Por otro lado, la Ruta Nacional 229 (RN 229), que une el empalme con la RN 3 y Balneario Marisol en Punta Alta, es transitable, pero con precaución.

La Ruta Nacional 249 (RN 249), que conecta el empalme con la RN 3 y el empalme con la RN 229 en Punta Alta, también requiere precaución para su tránsito. Asimismo, la Ruta Nacional 252 (RN 252), que abarca el tramo entre la Rotonda de Villa Sarsfield y el puente La Niña, presenta condiciones similares.

Finalmente, la Ruta Nacional 1V03 (RN 1V03), que conecta el empalme con la RN 3 y la Rotonda Ex Indiada, también está habilitada, pero se recomienda circular con precaución.

10:12 hsHoy

El Hospital Penna reactiva algunos de sus servicios

El acceso a guardia delEl acceso a guardia del Hospital José Penna (REUTERS/Juan Sebastián Lobos)

El Hospital Provincial José Penna, principal centro de salud de Bahía Blanca, comenzó a recuperar su funcionamiento tras los graves daños sufridos durante el temporal del pasado viernes.

El Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires implementó un amplio Plan de Contingencia que incluye la adecuación de espacios, la reorganización de servicios y el envío de recursos humanos y materiales para garantizar la atención médica en la región.

Más de 200 agentes sanitarios fueron enviados al hospital, junto con equipamiento médico, medicamentos, vacunas y personal especializado en salud mental. Estas medidas buscan restablecer la operatividad del establecimiento, que es clave para la atención de la población local.

Seguir leyendo

Sociedad

“¿Dónde está mi bebé?”: la angustia de una madre adolescente y la hazaña de una enfermera en medio de la inundación en Bahía Blanca

Publicado

on

Por

La tormenta arrasó con el Hospital Penna y decenas de niños tuvieron que ser evacuados de la Neonatología. Saira Delmiro, de 16 años, vivió una odisea para reencontrarse con su hija, Amely. Su historia y la de la enfermera que la salvó

El viernes 7 de marzo, Saira Delmiro (16) se despertó sobresaltada en su casa del barrio 9 de Noviembre, en Bahía Blanca. Eran las cuatro de la madrugada y afuera llovía sin parar. Horas después, cuando ya se había desatado el peor temporal de la historia de la ciudad, llegó a su teléfono un video que le heló la sangre: el hospital Penna, donde su hija Amely llevaba tres semanas internada en el sector de Neonatología, se había inundado.

“Me agarró un ataque de nervios. No veía a mi bebé desde la noche anterior y en las imágenes no aparecía el sector donde ella estaba. Me desesperé. Pensé que no se iba a salvar”, recuerda Saira en diálogo con Infobae.

Amely nació el 15 de febrero pasado, con solo 27 semanas de gestación y un peso de 940 gramos. Desde entonces, la beba pasaba sus días en una incubadora, con respirador y asistencia médica constante. Saira, que recibió el alta tres días después de traerla al mundo, la visitaba dos veces al día. “Trataba de pasar la mayor cantidad de tiempo en la Neonatología. Le cambiaba los pañales, me sacaba leche para que se alimentara y le hablaba permanentemente. Me costaba mucho verla así, tan chiquita y llena de cables”, explica.

A pesar del buen cuidado, en sus primeras semanas de vida, la evolución de Amely era inciertaprimero tuvo ictericia (NdR: una afección frecuente en los neonatos que provoca que la piel y las partes blancas de los ojos se tornen amarillas a partir de un exceso de bilirrubina en la sangre) y, luego, una infección que le comprometió los pulmones. “Todo venía siendo muy cuesta arriba”, explica su mamá

Pero la prueba más dura todavía estaba por llegar.

La primera imagen de Amely.La primera imagen de Amely. La beba nació el 15 de febrero con solo 27 semanas de gestación y un peso de 940 gramos

“¿Dónde está mi bebé?“

Después de ver los videos, aquel viernes 7 de marzo, Saira decidió ir al hospital Penna a buscar a su bebé. Llegó alrededor de las 17 y ahí se enteró de que Amely ya no estaba allí. “Pregunté adónde estaba mi hija y me dijeron que la habían trasladado. ‘Ella está bien, pero la llevamos a OSECAC’, me explicó el director de Neonatología. El problema es que eso quedaba pasando el centro y, con mi mamá, no teníamos cómo llegar. Paramos una camioneta que se ofreció a llevarnos, pero tuvimos que bajarnos antes. Cuando salimos del coche, el agua nos llegaba por encima de la cintura y la corriente te llevaba. Tuvimos miedo”, cuenta.

Durante horas, Saira y su madre se quedaron atrapadas en una vereda, sin poder avanzar. “Tuvimos que esperar a que bajara el agua. Estábamos empapadas y embarradas. Al final, empezamos a caminar por calles sin luz. ‘No vamos a llegar’, le decía a mi mamá”, cuenta Saira.

Finalmente, cerca de las 21:30, llegaron a la clínica. “Entré y dije: ‘Soy la mamá de Amely, una de las bebés que trajeron del Penna’. Ahí me llevaron a la sala de padres para que me cambiara y después nos reencontramos. Cuando la vi, me largué a llorar. No podía creerlo. Creí que no iba a sobrevivir”, dice.
Luciana Marrero, la enfermera queLuciana Marrero, la enfermera que cobijó a Amely en su pecho, debajo de su ambo, para darle calor y así salvarle la vida

“No tenés nada que agradecer”

Quien repone la otra parte de la historia, ahora, es Luciana Marrero, la enfermera que cobijó a Amely en su pecho, debajo de su ambo, para darle calor y así salvarle la vida. Junto a sus compañeras del Penna, Luciana puso en marcha un operativo de rescate que se extendió durante 18 horas ininterrumpidas hasta que lograron trasladar a todos los recién nacidos a un lugar seguro.

“Actuamos con el corazón y pensando en las madres que no pudieron llegar hasta sus hijos debido a la tormenta. Si no nos saliera del corazón, no podríamos haberlo hecho. La prioridad siempre son los bebés”, comentó la enfermera en una entrevista días atrás.

Luciana, quien trabaja en el turno noche de la Neonatología, conocía a Amely, pero no a Saira. Recién se vieron por primera vez días después de la tormenta. “Fue muy emotivo el encuentro. Ella estaba superagradecida por lo que hice. ‘No tenés nada que agradecer. Yo también soy mamá y te entiendo. Vos hubieras hecho lo mismo’, le dije. Me emocionó mucho verla afrontar una tarea tan enorme como la maternidad, siendo tan chiquita”, contó la enfermera a Infobae.
Así fue el encuentro entre Saira Delmiro y Luciana Marrero, la enfermera de neonatología del Hospital Penna de Bahía Blanca, que rescató a su bebé (Video/Telefe Noticias)

“A Luciana nunca la había visto porque yo me iba del hospital a las 21 y ella llegaba a las 24. El encuentro fue muy lindo. Me abrazó y me dijo que hizo lo que yo hubiera hecho. Si no fuera por ella, Amely no estaría hoy acá”, asegura Saira.

Pese a la incertidumbre por lo que vendrá, la joven se aferra a la esperanza. “Gracias a Dios, mi casa no se inundó y puedo ir y volver de OSECAC, aunque está mucho más lejos que el Penna. Amely sigue ganando peso y mientras ella esté bien, yo también lo estaré”, se despide Saira.

Amely, hoy. "Ya pesa másAmely, hoy. “Ya pesa más de un kilo. Mientras ella esté bien, yo también lo estaré”, dice su mamá

Volver a ponerse de pie

Tras la inundación, el hospital Penna, que también recibe pacientes de Tres Arroyos, Carmen de Patagones y otras localidades del sur de Buenos Aires, se encuentra en una situación crítica.

Ante la devastación, el personal de la institución solicitó la colaboración de la comunidad para reconstruir la sala de Neonatología y reponer los equipos perdidos. “Bahía necesita de la población. Nuestro sueño es volver a ver nuestra Neo en pie“, aseguraron las enfermeras.

Al cierre de esta nota, según informaron las autoridades locales, la ciudad comienza a reactivarse con la restauración de los medios de transporte y la recolección de basura. En tanto, este lunes, la Policía Científica logró establecer la identidad de 15 de las 16 víctimas fatales, quedando solo una, de entre 50 y 55 años, sin identificar. A su vez, se conoció que el número de evacuados descendió a 523 y que continúa la búsqueda de las hermanas Delfina y Pilar Hecker, de 1 y 5 años, quienes fueron arrastradas por la corriente durante el temporal.

Seguir leyendo

Mas Leidas

© 2022 FM Integracion 90.1. Todos los Derechos Reservados. | Desarrollado por Conexión Streaming

FM Integracion 90.1