La histórica victoria de Deportivo Riestra sobre River permitió conocer historias especiales, como la de sus goleadores de esta tarde, Enzo Barrionuevo y Nicolás Benegas, con el Superclásico como denominador común.

“Sí, soy hincha de Boca. Así que vale doble, je”, reconoció el delantero Benegas, que surgió en el club xeneize y jugó cuatro partidos en 2016. Sobre la comparación por su juego y su físico con su entrenador, Cristian Fabbiani, bromeó: “Lo he visto jugar pero yo soy mejor que él”.

Según precisó, su juego pasa por “tratar de aguantar para los que vienen de frente y buscar una tercera opción para llegar al gol”. “Tratar de aguantar un poco arriba, que nos estaba costando. Ellos tenían buenos y fuertes defensores y en el segundo tiempo los pude aguantar un poco y tratar de tener la pelota en la cancha rival”, agregó.

Sobre una victoria que calificó como “importántisima”, consideró que se apoyó en el juego del equipo. “Creo que todos estamos comprometidos, corríamos y metíamos, y eso nos llevó a que nos quedemos con los tres puntos en casa”, destacó en diálogo con TNT Sports.

Mientras por las venas de Benegas circula sangre azul y amarilla, por la de Enzo Barrionuevo corre blanca y roja. “Mi viejo, que está ahí arriba, me puso Enzo porque es hincha River pero, bueno, el triunfo se lo dedico a él”, dijo. Y enseguida compartió que este triunfo podría venir con una alegría aún mayor: “También se lo dedico a mi señora, que no sabemos si queda internada o no. Está en monitoreo, vamos a tener un bebé y se lo dedico a ella“.

Sobre su gol, el 1-0 parcial con un cabezazo perfecto, contó: “La verdad es que yo hago la cortina, salió el centro para atrás y me quedó. Por suerte fue gol y sirvió para sumar tres puntos que a nosotros nos sirve un montón, capaz que a ellos no. Nosotros peleamos ahí abajo y nos sirven un monton estos tres puntos”.

“Muy contento, el equipo hizo un esfuerzo enorme y sirvio para la victoria. Creo que jugamos contra un equipo de un a jerarquía impresionante y pudimos sacarlo adelante. Lo llevamos más a nuestro juego, un poco más sucio de lo que juegan ellos y pudimos sacarlo adelante gracias a Dios”, concluyó.

“Siempre se habla con el plantel, con los chicos. La verdad es que hay que levantar la cabeza, somos muy positivos. El año pasado nos pasó lo mismo y terminamos ascendiendo, así que ya pasamos todas nosotros. Creo que venimos de abajo y no hay nada imposible para nosotros, así que hay que levantar la cabeza y seguir. Y hoy quedó demostrado el gran triunfo con nuestras familias, nuestra gente. A seguir por este camino, trabajando con humildad siempre“, subrayó.