Con crisis de llanto, Giannina declaró por 7 horas en el juicio por la muerte de Maradona: “Fue una obra de teatro para tenerlo en un lugar oscuro, feo y solo”
La hija del Diez testificó este martes ante los jueces del TOC Nº3 de San Isidro. Su duro relato sobre el último cumpleaños de Diego y el pedido de disculpas a su familia porque tras el fallecimiento no quería vivir.
Acompañada de su hijo Benjamín Agüero, su hermana Dalma y su mamá, Claudia Villafañe, Gianinna Maradona llegó este martes al TOC Nº3 de San Isidro para declarar en el marco de la 17ª audiencia del juicio por la muerte de su padre, Diego, el máximo ídolo del fútbol argentino. Su testimonio comenzó pasadas las 12 del mediodía y fue uno de los más fuertes hasta el momento. “Me quería ir con él”, admitió sobre la oscuridad que la abordó tras el fallecimiento de su padre.
Desde adentro de la sala, además de los jueces y los abogados de ambas partes, también escucharon su relato tres de los siete imputados en la causa; su hijo, sus hermanas Jana y Dalma Maradona y la ex pareja del futbolista, Verónica Ojeda. Durante su declaración, Gianinna lloró varias veces,reclamó que la internación domiciliaria donde murió su papá no fue seria y se quebró al recordar el llamado que recibió el día en que falleció Maradona.
“Pregunté si estaba vivo”,dijo que fue su primera respuesta al enterarse de que su padre se había descompensado en su casa del barrio San Andrés, en Tigre. Luego se conocería que para ese entonces Diego ya estaba muerto.
No obstante, el momento más doloroso de su relato llegó casi cinco horas después de haber comenzado su declaración, cuando le pidió perdón a su familia y contó que, tras el fallecimiento de Maradona el 25 de noviembre de 2020, pensó en no vivir más.
Gianinna y Diego Maradona
“A mí me costó muchísimo salir adelante. Le quiero pedir disculpas a mi hijo, a mi hermana y a mi mamá, pero por mucho tiempo le hablé a mi papá y le pedía que me quería morir, que me quería ir con él. Que no tenía más ganas de nada”, dijo en medio de un fuerte ataque de llanto.
Y agregó: “Tuve ayuda psicológica y psiquiátrica para volver a levantar y ver crecer a mi sobrina, Roma, y seguir criando a mi hijo, que la verdad que lo hago sola. Todo lo que hicieron, cómo lo manipularon y cómo lo dejaron solo no me lo puedo sacar de la cabeza. Me duele escuchar cómo se referían a él y a todos nosotros. Me parece que nadie se lo merece, pero mi papá menos que nadie”.
El deterioro de la salud de Diego y la internación domiciliaria
Según su relato, en el último tiempo ella había advertido que Diego estaba cada vez peor de salud y aseguró habérselo comentado a Leopoldo Luque, a quien definió como el médico de cabecera de Maradona. Él, no obstante, le decía que “estaba todo bien”.
El ingreso de Gianinna al palacio de Ituzaingó
También manifestó su indignación con el psicólogo imputado Carlos Díaz, presente este martes en la sala, sobre quien dijo: “Yo confié en que iba a ayudar a mi papá, pero evidentemente él estaba cubriendo otros huecos, quería pasarnos la pelota a nosotros”.
Gianinna coincidió con sus hermanas Dalma y Jana al decir que accedió a la internación domiciliaria en Tigre por recomendación de los acusados Luque, Cosachov y Díaz, pero que en realidad ella no consideraba que fuera la mejor opción.
“La propuesta era una internación domiciliaria seria, pero nunca cumplieron. Yo elegí creer en Luque, Cosachov y Díaz, que lo venían siguiendo a mi papá“, señaló.
Sin embargo, dijo que “con el diario del lunes” se dio cuenta de que “fue todo una puesta en escena”. “Una obra de teatro que nos montaron para seguir con lo que ellos buscaban, que era seguir teniendo a mi papá en un lugar oscuro, feo y solo”, declaró Gianinna.
Verónica Ojeda presenció el testimonio de Gianinna Maradona
En ese momento, el fiscal Patricio Ferrari reprodujo el audio de la reunión en Clínica Olivos, donde se decidió la externación de Maradona. Duró una hora. Al finalizar, la hija de Diego señaló: “Me causó mucho dolor, no pude evitar llorar. Me parece muy injusto toda esa charla, todo lo que se prometió y no se cumplió, los responsables que hablaban ahí y nos aseguraban cosas que después no pasaron. Siento que fue una manipulación horrible”.
En este sentido, Gianinna avaló los dichos de la psiquiatra Cosachov al asegurar que ella le habría pedido a la medicina prepaga toda la aparatología y el personal necesario para la rehabilitación del Diez en Tigre.
No obstante, la hija del Diez no le quitó responsabilidad a la profesional imputada y remarcó: “La prepaga se comprometía a dar las cosas que pedían, pero ellos (Luque, Cosachov y Díaz) eran los responsables. De hecho, Luque se compromete a no estar todos los días, pero sí a llevar un seguimiento y definir el médico clínico”.
La última vez que lo vio a Diego con vida y el día de su muerte
Gianinna vio a su padre con vida por última vez el 18 de noviembre de 2020, una semana antes de su fallecimiento. No lo vio bien: lo vio hinchado y con voz robótica. Se preocupó, así que le avisó a Leopoldo Luque.
“Mi papá estaba tirado en la cama sin poder levantarse, estaba muy hinchado, sus ojos, sus manos. Yo me quedé con él en la cama, le pedía que se levante, que venga al comedor conmigo, pero no tenía ganas de nada. Sus ojos no se veían de lo hinchados que estaban”, recordó Gianinna sobre ese día.
Y agregó: “Yo me comuniqué con Luque para preguntarle por qué estaba tan hinchado. Tenía hasta una voz robótica, no era su voz. Le pregunté cómo se seguía y me decía que era normal, que al estar acostado y sin moverse era por eso su hinchazón. Pero estaba muy hinchado y yo se los avisé. Díaz y Cosachov sabían”.
Gianinna Maradona en el juicio por la muerte de su papá
Desde ese día, Gianinna dejó de ir a la casa del barrio San Andrés, en Tigre, por pedido del imputado Carlos Díaz, el psicólogo, quien había recomendado que le den espacio.
El 25 de noviembre de 2020, sin embargo, ella y Jana Maradona decidieron hacer caso omiso a esa indicación y volver a visitar a su padre. El plan iba a ser al mediodía, para almorzar con él y luego mantener una reunión con sus médicos. Pero ese día, Diego se descompensó.
“A las 12:30 del mediodía me llama Cosachov, me dice que mi papá se había descompensado, que estaban intentando reanimarlo. Yo le pregunté si estaba vivo y ella me responde ‘vení para acá, tranquila’”.
Sobre su llegada al barrio, recordó: “Cuando llegué ya estaban las ambulancias. Estaban intentando reanimarlo, no me dejaban entrar. Me vino a buscar mi primo, yo no entendía qué había pasado. Después de un rato salió un médico, el de la ambulancia, y me dijo que mi papá estaba muerto,que habían intentado un montón de cosas para reanimarlo, pero que ya no había nada para hacer”.
El duro recuerdo de Gianinna sobre el último cumpleaños de Diego
Gianinna habló del duro recuerdo del 10 de octubre de 2020, un mes y medio antes de la muerte del Diez. Para ese entonces, describió que su padre ya estaba diminuido físicamente y desorientado.
“El 10 de octubre hablé con mi papá y le pregunté cómo estaba. No estaba muy bien. Me dijo: ‘¿cómo voy a estar bien si pasé mi cumpleaños solo?’. Yo le dije que no había sido su cumpleaños, que no lo había pasado solo. Le recordé que cumplía el 30 de ese mes. Estaba perdido en tiempo y espacio, básicamente”, relató.
Tras ese día, se contactó con el imputado Leopoldo Luque porque no lo veía bien a Diego. “Le dije que lo veía mal, que además de no verlo feliz lo veía muy perdido, lento, que cada vez podía caminar menos. Luque me dijo que lo estaba cuidando. Me habló de Cosachov, que era una psiquiatra que habían puesto para medicarlo de forma correcta, y también me habló de Díaz, el psicólogo. Me dijo que tenía días buenos y días malos, pero que cada vez estaba mejor. Ellos no veían lo mismo que yo”, dijo.
Luego, Gianinna habló del verdadero día del cumpleaños de Diego, cuando contó que lo fue a saludar a su casa de La Plata y, ante los jueces del tribunal de San Isidro, volvió a relatar una triste escena que marcó el inicio de lo que vendría después.
Fotografía: RS Fotos
“Cuando llegamos el día del cumpleaños a Brandsen, el 30 de octubre, entré a la casa, él estaba sentado en un fogón. Lo fuimos a saludar con mi hijo que tenía una remera de él abrazando a (Claudio) Caniggia. Se la muestra, él lo mira y no se reconoce (en la imagen). Había mucha gente a su alrededor, pero nadie se daba cuenta de la situación”, contó la hija del ex DT.
Gianinna recordó que en esa oportunidad le preguntó a su papá si se quería ir con ella, dijo que él le contestó que sí y que se tiró a sus brazos “como cuando un nene de 9 meses se te tira encima”.
“Sabía que lo tenía que hacer todo muy rápido porque ya había intentado llevármelo otras veces y no lo dejaron. Pero no pude: lo vinieron a buscar porque tenía que cumplir un contrato y a mí, a mi hijo y a mi amigo nos sacó la Policía. A él lo llevaron a la cancha,donde todos lo vieron mal, no se podía ni poner el barbijo. No estaba apto ni siquiera para ver su imagen en la camiseta de mi hijo”, recordó sobre su aparición pública en el estadio de Gimnasia.
La Universidad de Buenos Aires se ubicó en el puesto 10 de la medición regional y ratificó su posición como la primera del país, pero casi la mitad de las instituciones argentinas cayeron en la lista. La Universidad Nacional de La Plata y la Austral completan el podio nacional
La Universidad de Buenos Aires (UBA) se mantiene como la mejor universidad del país y ocupa el puesto 10 del nuevo ranking QS de América Latina y el Caribe, elaborado por la compañía británica Quacquarelli Symonds. En esta medición, casi la mitad de las universidades argentinas empeoraron su posición: desde QS advirtieron sobre todo por la producción de investigación científica y por la precarización de las condiciones laborales de docentes e investigadores como consecuencia de los recortes presupuestarios.
La UBA se destaca a nivel regional por su prestigio: ocupa el segundo lugar en los indicadores de reputación entre académicos y empleadores internacionales. Luego figura la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), que se ubicó en el puesto 21 de la región, y que también se destaca por su reputación académica. El podio nacional se completa con la Universidad Austral, que alcanzó el puesto 25 en América Latina.
Luego aparecen la Universidad Nacional de Córdoba (que se mantiene en el puesto 33) y la Pontificia Universidad Católica Argentina (puesto 40). Doce universidades argentinas figuran entre las 100 mejores de América Latina: la mitad son públicas y la otra mitad, privadas.
Según los indicadores de QS, la mejor universidad de América Latina es la Pontificia Universidad Católica de Chile, seguida de la Universidade de São Paulo (Brasil), la Universidade Estadual de Campinas y el Tecnológico de Monterrey (México). En el quinto puesto regional se ubicó la Universidade Federal do Rio de Janeiro.
Brasil tiene tres universidades en el top 5, mientras que Chile y México tienen dos cada uno. En el top 10 también hay una institución de Colombia, la Universidad de los Andes, en el puesto 8.
Las otras instituciones argentinas que se ubicaron entre las 100 mejores son la Universidad Torcuato Di Tella (puesto 48), Universidad de San Andrés (51), Universidad Nacional de Rosario (62), Universidad Nacional del Litoral (87), Universidad de Palermo (95), Universidad Nacional de Cuyo (97) e Instituto Tecnológico de Buenos Aires (97). De las 45 universidades argentinas rankeadas, 20 empeoraron su posición con respecto al año pasado, mientras que 12 mejoraron y 13 permanecieron estables.
“El sistema de educación superior de Argentina es ampliamente reconocido por su tradición de acceso público y su sólida reputación académica, con la Universidad de Buenos Aires ocupando un lugar destacado entre los académicos y empleadores internacionales y el país disfrutando de algunos de los mejores recursos docentes de la región”, analizó Ben Sowter, vicepresidente senior de QS.
“Sin embargo –continuó Sowter–, los recientes recortes de financiación y la inflación han erosionado los presupuestos universitarios, lo que ha creado presión sobre la capacidad docente y de investigación, que no ha seguido el ritmo de sus homólogos regionales y ha provocado una mayor precariedad laboral del personal”.
El desafío de la investigación
El informe de QS señala que la producción de investigación –medida por el número de artículos publicados por profesor– es uno de los puntos críticos para el sistema universitario argentino: ninguna institución local se encuentra entre las 50 primeras en este rubro. La posición más destacada es para la Universidad Nacional de Mar del Plata, que ocupa el puesto 62 en este indicador (y el puesto 110 en la clasificación general).
El ranking QS destaca a la UBA por su participación en redes internacionales de investigación: ocupa el octavo lugar en este indicador. Pero la universidad experimentó fuertes caídas en las demás métricas de investigación, incluidas las citas por artículo y los artículos por profesor.
“Es un orgullo volver a estar entre las diez universidades más prestigiosas de la región, especialmente destacándonos en dos ítems tan importantes como el de reputación académica y reputación del empleador. Sin embargo, el desfinanciamiento que venimos padeciendo comienza a hacerse sentir en los resultados referentes a investigación científica”, consideró Ricardo Gelpi, rector de la UBA.
“Es una señal de alerta que no debemos desatender y que las autoridades nacionales tienen la obligación de reconocer. La formación de equipos científicos no es algo que se hace de un día para el otro y, si entramos en una espiral descendente en este sentido, va a costar mucho tiempo y esfuerzo recuperarla”, sostuvo Gelpi.
Por otro lado, el sistema universitario nacional logra un buen desempeño en el indicador referido al ratio de profesores por alumno, donde supera la media regional. La UCA se destaca en este punto: ocupa el puesto 5 en América Latina. También sobresalen en este indicador la UADE, la UP, la Austral y la Universidad Nacional de San Luis.
“Revalidar por sexto año consecutivo el liderazgo entre las universidades privadas argentinas y alcanzar el puesto 25 en Latinoamérica es reflejo de un desempeño sostenido. Este logro es fruto de un proyecto de largo plazo y del compromiso diario de docentes, estudiantes, investigadores, graduados y aliados institucionales”, afirmó Julián Rodríguez, rector de la Universidad Austral.
El ranking QS regional evaluó a 491 universidades de 26 países de América Latina y el Caribe. Argentina es el cuarto país más representado, con 45 instituciones, por debajo de Brasil (con 130), México (67) y Colombia (67). En tanto, Chile (41) se destaca por la buena posición relativa de sus universidades.
La medición considera 8 indicadores: reputación académica (30%), reputación entre empleadores (20%), ratio profesor-alumno (10%), citas por artículo (10%), personal con doctorado (10%), redes internacionales de investigación (10%), publicaciones por facultad (5%) e impacto web (5%).
Si bien se basa en los mismos parámetros que el ranking QS global, publicado en junio, la versión regional introduce pequeñas variaciones en los indicadores, que explican algunos cambios en la posición relativa de las universidades argentinas (en el ranking global, por ejemplo, la UBA aparece como la primera universidad de América Latina).
El nuevo ranking QS se dio a conocer en la previa de la Cumbre de la Educación Superior de QS Américas 2025, que se realizará este jueves y viernes en el hotel Hilton en la Ciudad de Buenos Aires. Además de varios expertos internacionales, la agenda del evento incluye intervenciones del jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, y del rector de la UBA, Ricardo Gelpi.
La policía peruana y argentina rastreó los movimientos de Tony Janzen Valverde a través de sus celulares y lo interceptó oculto en un camión en Pucusana, tras seis días prófugo
La caída de Tony Janzen Valverde Victoriano, conocido como ‘Pequeño J’, puso fin a una operación policial que mantuvo en vilo a las autoridades de tres países. El joven de 20 años, acusado de ser el autor intelectual de un triple feminicidio en Buenos Aires, fue localizado en el sur de Lima luego de atravesar fronteras clandestinas y desplazarse con ayuda de una red criminal que lo protegía durante su huida.
Su arresto fue posible gracias a un trabajo coordinado entre la Policía Bonaerense y la Dirección Antidrogas de la Policía Nacional del Perú, que lograron rastrear sus movimientos a partir de la señal de sus teléfonos. La fuga, que comenzó en Argentina, incluyó un paso por Bolivia y culminó en la localidad limeña de Pucusana, donde efectivos de civil lo interceptaron escondido en un camión de carga.
¿Cómo logró escapar de Argentina?
El recorrido de ‘Pequeño J’ empezó en Florencio Varela, al sur del Gran Buenos Aires. Tras abandonar esa ciudad, cruzó la frontera por pasos cordilleranos poco vigilados con el objetivo de despistar a las fuerzas de seguridad. Las investigaciones revelan que desde el inicio existía la hipótesis de que su destino final era el Perú, por lo que la policía argentina decidió no alertar a las autoridades bolivianas al considerarlas un territorio de tránsito.
Mientras se desplazaba en territorio argentino, utilizó varios teléfonos celulares para comunicarse con sus contactos y recibir apoyo logístico. Ese detalle resultó clave para reconstruir su ruta, ya que los equipos de inteligencia lograron triangular la señal y anticiparse a sus movimientos. Su habilidad para movilizarse sin documentos oficiales lo mantuvo varios días fuera del alcance policial.
El paso por Bolivia y la entrada irregular al Perú
Una vez en Bolivia, Valverde continuó su fuga utilizando buses de transporte interprovincial y alojándose en lugares discretos para no ser detectado. No existen registros oficiales de su ingreso, lo que confirma que burló los controles migratorios mediante pasos no autorizados. Desde allí se dirigió hacia la frontera sur del Perú, donde se embarcó en un camión que lo trasladaría por la carretera Panamericana.
El seguimiento a través de antenas telefónicas permitió identificar el vehículo en el que se ocultaba. Fue en ese contexto que la policía peruana montó un operativo encubierto, aprovechando que un bloqueo de pescadores en la vía obligó al camión a reducir su velocidad. Esa circunstancia facilitó la intervención de los agentes, quienes lograron detener el transporte sin generar enfrentamientos.
El engaño policial que permitió su captura
La coordinación entre las fuerzas de seguridad de ambos países fue decisiva. Horas antes de la detención de Valverde, la policía ya había arrestado en Lima a Matías Agustín Ozorio, considerado su principal colaborador. Para evitar que ‘Pequeño J’ advirtiera la caída de su socio, los agentes peruanos utilizaron el teléfono de Ozorio y mantuvieron comunicación con él haciéndose pasar por su mano derecha.
Esa maniobra fue determinante, ya que Valverde nunca sospechó que sus mensajes eran respondidos por la policía. Creyendo que se reuniría con Ozorio en el centro de Lima, continuó su trayecto en el camión hasta que fue interceptado en Pucusana. En ese momento se identificó ante los efectivos de la Dirección Antidrogas de la PNP, quienes lo esposaron y grabaron el procedimiento.
Lo que viene tras su arresto
La detención de ‘Pequeño J’ se produjo poco más de una hora después de la de Ozorio. Con ambas capturas, el número de implicados en el triple crimen de Morena Verri, Brenda del Castillo y Lara Gutiérrez ascendió a nueve. El caso provocó gran conmoción en Argentina y mantiene en alerta a las autoridades judiciales de ambos países.
Actualmente, el proceso se centra en los trámites de extradición para que Valverde sea trasladado a Buenos Aires y enfrente los cargos que se le imputan. Mientras tanto, permanece bajo custodia de la Policía Nacional del Perú, a la espera de la resolución que defina su futuro judicial.
En el marco de su conflicto con la entidad, el Gobierno avanzó sobre los aportes que debe realizar los clubes al Estado. Casi duplicó la alícuota e impuso un extra para compensar la pérdida de recaudación.
El Gobierno reavivó su pelea con la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), una disputa que se originó ya en el inicio de la gestión de Javier Milei, promotor de las figuras de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) que permite el ingreso de inversores privados a los clubes. Ahora volvió a la carga contra un beneficio impositivo que favorecía a las entidades por el cual tenía reducido su aporte al Estado.
El nuevo capítulo, que ocurre días después del duro cruce entre el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el número 2 de la AFA, Pablo Toviggino, se materializó mediante la Disposición 16/2025 del Ministerio de Capital Humano, publicada este lunes en el Boletín Oficial. Más específicamente de la Subsecretaría de Seguridad Social, que aborda el régimen de percepción y retención de aportes y contribuciones con destino a la seguridad social en el ámbito del fútbol profesional.
Guerra Gobierno vs AFA: quitan beneficios y aumentan alícuotas a los clubes
A través de esta medida el Gobierno casi que duplicó la alícuota que se aplica a los clubes por su contribución a la seguridad social. Ya a fines del año pasado la administración de Javier Milei había derogado el régimen que beneficiaba a los clubes y les dio 6 meses para adecuarse mientras se establecía el nuevo formato. Aunque en mayo pasado la AFA logró una cautelar para suspender esa decisión, el Ejecutivo avanzó.
Luego de que Claudio “Chiqui” Tapia fuera reelecto presidente de AFA hasta 2028, el Gobierno le puso fin al Régimen Especial de Seguridad Social, nacido en 2003 durante la presidencia de Eduardo Duhalde y extendido hasta 2019 cuando fue derogado por Mauricio Macri, bajo el argumento de que generaba un desfinanciamiento al Estado nacional. En octubre de 2023 el beneficio fue restituido por Alberto Fernández.
Con ese beneficio los clubes tenían una alícuota especial de 7,5% para tributar los aportes patronales. Ahora, la actual administración determinó que la alícuota de equilibrio del régimen debe ser del 13,06% para cubrir las obligaciones corrientes, y además se estableció una alícuota adicional del 5,56% durante un período de doce meses para recuperar el faltante acumulado, resultando en una alícuota total del 18,62%.
Según el Gobierno, el beneficio que recibieron los clubes generó una pérdida de recaudación para el Estado de casi $20.000 millones en el plazo de un año.
La disposición completa con la que el Gobierno quita beneficios y aumenta alícuotas a los clubes