A 43 años del comienzo del conflicto bélico entre Argentina y Reino Unido por la Islas Malvinas, en Río Grande los veteranos de guerra pidieron a los responsables políticos locales y nacionales “conciencia, responsabilidad y patriotismo”.

Con temperaturas bajo cero y acompañados por cientos de vecinos de la ciudad ubicada al norte de la provincia de Tierra del Fuego, se desarrolló el martes por la noche la vigilia número 30 en el Monumento a los Caídos en Malvinas, en la costanera de la ciudad.

El acto, organizado por el Centro de Veteranos, contó con la participación de soldados del BIM 5, quienes replicaron el desembarco en lo que se llamó el “Operativo Rosario”. Luego, integrantes del grupo de danzas “Soles que dejan Huellas” recrearon un cuadro musical en honor a los héroes de ese conflicto bélico.

A las doce de la noche, tras escuchar la sirena, el veterano de guerra Bernardo Ferreyro dio un fuerte discurso en el que resaltó los reiterados avasallamientos políticos de los ingleses sobre el territorio argentino y el aval del gobierno del presidente Javier Milei. También, disparó conta los gobernantes fueguinos por la permanencia del radar inglés en cercanías a Tolhuin.

“En aquellos tiempos todos dimos algo y algunos lo dieron todo. Hoy, solo nos queda recordar año tras año a esos héroes y a esos valientes que, sin dudar un segundo, dieron su vida por esta maravillosa tierra. Tierra que no solo dio un lugar único y maravilloso para vivir junto a nuestros seres queridos, sino que también nos hace sentir permanentemente orgullosos de ser argentinos. Por eso, no podemos permitir que se apague la llama de la causa Malvinas”, comenzó Ferreyro.

“Hace más de cuatro décadas que venimos pidiendo, reclamando que a través de la cuestión Malvinas se implementen las presiones que obliguen a Gran Bretaña a sentarse a dialogar por la soberanía. Y sólo vemos con estupor que los responsables de eso tienen tibias acciones al respecto, sólo para mantener al pueblo contento, pero hacen tratados secretos entre gallos y medianoche como los firmados en 1989 y 1990, comúnmente conocidos como los tratados de Madrid I y II. Tratados que ni siquiera fueron consolidados por nuestro Congreso de la Nación, fueron ratificados por una ley a escondidas de la población”, agregó.

Asimismo, se refirió al radar de la empresa con capitales británicos que se instaló en la localidad de Tolhuin durante el gobierno de Alberto Fernández y la gestión del gobernador Gustavo Melella: “En ese mismo reclamo, también podría citar que los ingleses nos plantaron un radar en el patio de nuestra casa y nosotros seguimos discutiendo si corresponde o no que lo desarmen. Hechos y acciones que rayan el título de traición a la patria”.

Río Grande resiste a un posible proceso de desmalvinización

Al finalizar el acto en conmemoración a los veteranos, Tiempo dialogó con Raúl Villafañe integrante del centro de ex combatientes de la ciudad quien expresó: “Lo primero que se me viene a la memoria son mis compañeros caídos, a los que tuve que ayudar, es un día muy especial y esos recuerdos florecen”.

Asimismo, se refirió al contexto nacional y la política exterior que está llevando adelante la gestión libertaria. “Nos da un poco de miedo, pero todavía tenemos la convicción de que vamos a seguir adelante. Vemos que seguimos construyendo la malvinización con nuestros hijos y la ciudadanía, esto es un buen empuje para que todo siga”.

Por su parte, el gobernador Melella, dijo a este medio que “el compromiso tiene que ser permanente” y resaltó la presencia de diputados nacionales en el acto.  En cuanto la visita de la vicepresidenta de la Nación Victoria Villarruel el 2 de abril a Ushuaia, indicó: “Creo que la vicepresidenta podrá gustar más o menos, estamos en términos ideológicos en lugares distintos, pero entiende la causa Malvinas. El reclamo lo tenemos que hacer todos. Primero puertas adentro de casa y creo que la política nacional ha cambiado y el último acuerdo de cancillería con el Reino Unido no es bueno: apunta a destruir el camino que se venía haciendo de recuperación desde la pasa y obligar a Gran Bretaña a que se siente a negociar”.

Por su parte, el intendente de la ciudad, Martín Perez, manifestó a Tiempo: “Estamos atravesando un proceso de demalvinizacion a nivel nacional, pero la realidad de Río Grande es totalmente distinta porque es una ciudad malvinera que sostiene y reafirma la causa, con un pueblo comprometido y acciones concretas, pero estamos cruzados por una realidad nacional totalmente adversa en ese sentido”.

“Ojalá que la presencia de la vicepresidente en Ushuaia sirva para que se lleven adelante acciones diplomáticas para que la argentina mejore su posición respecto a la soberanía, pero veo difícil eso más teniendo en cuenta un presidente que admira a Margaret Thatcher, nosotros estamos en el camino opuesto”, añadió.

Finalmente, en diálogo con este medio, la diputada nacional de Unión por la Patria, Agustina Propato -que formó parte del contingente de representantes nacionales que visitó la ciudad de Río Grande- señaló: “La verdad que es una vivencia inexplicable, es un mosaico de representantes combatientes de todas las provincias del país que vienen a compartir esta jornada, muchas emociones, toda la comunidad fueguina, respirando a menos de 600 kilómetros nuestras Malvinas, esta continuidad que uno siente desde acá”.

“Creo que hoy más que nunca que nuestra responsabilidad es estar acá y malvinizar en un contexto de un gobierno que toma decisiones más que agraviantes para el respeto a nuestros héroes, a nuestros caídos”, concluyó.