El Presidente recibió a la mandataria italiana en la Residencia de Olivos y hoy será la reunión bilateral en Casa Rosada. Habrá una ofrenda floral y una gala de ballet. Ambos líderes buscarán dinamizar el intercambio comercial y profundizar la convergencia en asuntos estratégicos. El Presidente hablará con la primera ministra italiana sobre la Liga de Naciones conservadoras que pretende impulsar
Giorgia Meloni, presidenta del Consejo de Ministro de Italia, aterrizó esta tarde en Buenos Aires para iniciar su primera visita de Estado a Argentina desde que asumió el poder en su país. Tras su participación en el G20 de Río de Janeiro, la líder de Fratelli d’Italia consolidará su sintonía ideológica y personal con Javier Milei. Para el Presidente argentino resulta clave la llegada de la Primera Ministra para afianzar la alianza estratégica con una nación con la que comparte la visión geopolítica sobre los conflictos globales.
La Primera Ministra arribó minutos después de las 17:30 en el Aeroparque de la Ciudad de Buenos Aires, donde fue recibida por Eduardo Bustamante, vicecanciller, Bettina Fonseca, directora de Europa del Ministerio de Relaciones Exteriores, y por Fabrizio Lucentini, embajador de Italia en Argentina. En tanto que el jefe de Estado y Gerardo Werthein, canciller, llegó también esta tarde a Buenos Aires provenientes de Brasil.
Según pudo conocer Infobae, Milei la agasajó a Meloni con una cena esta noche en la Residencia Presidencial de Olivos. Se trató de un encuentro por fuera del protocolo formal, para generar un encuentro distendido que profundice el vínculo personal y la afinidad diplomática. El Presidente estrenó ese formato el sábado pasado con Emmanuel Macron y lo replicó este martes con la líder italiana.
La primer ministro italiana llegará este martes (AP)
En tanto que el miércoles, Meloni participará de una ofrenda floral que se realizará a la mañana en la Plaza San Martín, frente a la Cancillería, donde se espera que asistan el canciller Werthein y el embajador Lucentini. Luego, está previsto que a las 11 tenga lugar la reunión bilateral en la Casa Rosada, en donde se espera que también haya intercambios entre ministros argentinos e italianos.
Por la tarde del miércoles, Meloni fue invitada a una gala en el Teatro Coliseo. La primera parte será institucional, donde la Primera Ministra dará unas palabras ante empresarios y cerca de 1000 invitados de la comunidad italiana en Argentina. Luego habrá un ballet dedicado al cine italiano. El Presidente Milei también fue invitado y aún no confirmó asistencia a ese evento.
Con su participación en el G20, Milei cerrará una de sus semanas de mayor vuelo diplomático en su política exterior. Si bien su posicionamiento narrativo sobre la Agenda 2030 genera debates entre internacionalistas, políticos y diplomáticos, el Presidente exhibió dotes de pragmatismo y, sin resignar convicciones, se reunió en el lapso de 10 días con los líderes más poderosos del sistema internacional.
Meloni junto a Lula
Viene de su encuentro íntimo con Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, en la CEPAC de Mar-A-Lago, en Palm Beach, siguió con la visita a Argentina de Emmanuel Macron, continuó con su viaje Brasil, donde mantuvo bilaterales con Xi Jinping (China), Narenda Modi (India) y Kristalina Giorgieva (titular del FMI). Y pese a marcar diferencias de criterio, apoyó en disidencia el comuniqué final de la cumbre. Ese raid diplomático finalizará mañana, cuando reciba a Meloni en su despacho de la Casa Rosada.
Milei busca consolidarse como referente global de una Liga de Naciones Conservadoras que funcione como contrapeso de la agenda que promueve la ONU. Conoce que al igual que Trump, Meloni comparte valores en ese sentido. La foto de ambos en Balcarce 50 será un modo de ratificar esa convergencia.
La sintonía ideológica y personal de Milei y Meloni fue inmediata y permitió que el vínculo entre ambos fluya. Se reunieron tres veces en este año, dos en suelo europeo y una en EEUU. Esa relación ahora sumará un nuevo capítulo. El 8 de octubre, el canciller italiano, Antonio Tajani, había visitado Argentina y mantuvo un encuentro con Milei en Casa Rosada que allanó el camino para el viaje de la Primera Ministra.
En el Palazzo Chigi deslizan que Meloni tiene interés estratégico en la visita a Argentina para ahondar la relación bilateral. Es un gesto simbólico con peso diplomático el hecho de que sea el primer país al que viaje luego del G20. La líder italiana asume que su afinidad con Milei, y el vínculo histórico entre Roma y Buenos Aires, puede permitir que Argentina sea una puerta de entrada para profundizar la inserción comercial en la región.
Otro punto clave de la visita de Meloni es la relación comercial con Argentina. Italia tiene interés de dinamizar el intercambio económico y de explorar inversiones en áreas estratégicas con la Inteligencia Artificial y la alta tecnología. En Argentina hay 300 empresas italianas donde trabajan cerca de 20 mil personas. Se estima que facturan en torno a US$ 2.800 millones en sectores como la infraestructura, automotriz y la energía.
En el plano geopolítico, Roma apoya el proceso de ingreso a la OCDE que inició Argentina en mayo. Además, respalda la posición en contra del régimen de Nicolás Maduro en Venezuela y se suma a la presión internacional para que el país bolivariano exhiba las actas de las elecciones del 28 de julio, en las que el líder chavista se autoproclamó ganador ante el opositor Edmundo González Urritia.
En tanto que Meloni y Milei convergen en la perspectiva sobre conflictos globales como la situación en Medio Oriente y la condena a Rusia por la invasión a Ucrania.
Javier Milei y Emmanuel Macron durante el G20 de Brasil
El futuro incierto del Acuerdo Mercosur-Unión Europea
En cuanto al Acuerdo de la Unión Europea con el Mercosur, las negociaciones entraron en terreno cenagoso. Macron le dijo a Milei que hará todo lo posible para bloquearlo. Además, el presidente francés mantuvo un encuentro informal con Meloni en el G20 en el que insistió con su postura ante la líder italiana. París está movilizada por estas horas por las protestas de los agricultores franceses en contra el Tratado de Libre Comercio.
Además, Macron fue abordado anoche por la prensa durante una caminata nocturna por las playas de Ipanema, junto a su esposa Brigitte Macron, y se encargó revelar su encuentro con Meloni en Río de Janeiro y deslizó que le ratificó a la líder italiana su rechazo al Acuerdo con el Mercosur.
Si bien el canciller de Meloni, Antonio Tajani, había dicho en octubre que estaban “abiertos” a las negociaciones del Acuerdo, esta semana hubo un punto de resistencia en el Palazzo Chigi.Francesco Lollobrigida, ministro de Agricultura de Italia, puso reparos y consideró que el tratado es desfavorable para los agricultores italianos y europeos. ¿Habrá logrado Macron convencer a Meloni para no firmar el pacto?
Entre los líderes europeos que sí impulsan el Acuerdo sobresalen Úrsula von der Leyen, presidenta de la Unión Europea, quien hizo arduas gestiones sobre el tema en el G20, Olaf Scholz, canciller de Alemania, y Pedro Sánchez, presidente de España.
La idea que sobrevuela tanto en Bruselas como en Montevideo es que se aceleren al máximo las negociaciones para rubricar el acuerdo comercial en diciembre, en la cumbre del Mercosur que se hará en Uruguay. La resistencia francesa, a la que se suman otros países europeos, las dudas de Milei sobre el bloque regional y su mala relación con Lula Da Silva generan obstáculos para concretar la firma del tratado en lo sucesivo.
En La Plata mantienen las dudas sobre el accionar de la agrupación ultra K en los acuerdos subterráneos. Entre los intendentes creen que lograrán acercar posturas
Idas y vueltas. Una vez más. Van y vienen los pedidos de apoyo para que el Gobierno bonaerense tenga la habilitación para endeudarse y respire hondo en el medio de una gestión asfixiada por la falta de fondos de la Casa Rosada. Detrás de esas negociaciones cruzadas, permanentes e inestables, está presente la interna del peronismo. La relación tormentosa y furiosa que tienen el kicillofismo y el cristinismo.
Ayer por la tarde, Kicillof hizo un pedido concreto y directo. Tomó la precaución de dejar expuesta la necesidad que tiene su gobierno de obtener el endeudamiento y la situación de debilidad en la que deja a la gestión si la ley no sale. En La Plata se encargaron de reforzarlo. “Si no logramos sacarlo, quedamos en una situación crítica”, precisaron.
“La provincia de Buenos Aires necesita las herramientas para no desproteger a nuestro pueblo. Es una emergencia económica del país y de la provincia. Estamos atravesando una profunda recesión que afecta a todos los sectores”, expresó el Gobernador durante una conferencia de prensa que brindó en La Plata.
Kicillof aseguró que se perdieron “5.000 empresas en la provincia” y “172.000 puestos de trabajo”, además de destacar que hay “mil obras frenadas en todos los rubros” con una gran cantidad de “despidos, suspensiones y cierres de empresas”. El Gobernador habló de “asfixia financiera” por parte del gobierno de Milei.
En la conferencia, que buscó ser una muestra de alineamiento detrás del pedido del Gobernador, había referentes del Frente Renovador, La Cámpora y el peronismo bonaerense, identificado, sobre todo, en los intendentes y el sector sindical.
La cuestión por el endeudamiento deja al descubierto la interna peronista en la Provincia de Buenos Aires (Adrián Escandar)
Sin embargo, hay dos versiones de una misma historia. El presidente del bloque de diputados de Fuerza Patria en la Legislatura Bonaerense, Facundo Tignanelli, es el vocero de la postura del kirchnerismo. En los últimos días no se ha movido un centímetro de su discurso público. Consideró que es necesario sacar la ley de endeudamiento “para poder cumplir con todas las obligaciones que la provincia tiene”. Además, sostuvo que en el peronismo vienen “trabajando para tratar de lograr esa ley tan necesaria”.
La unidad que expresa el legislador camporista, no es decodificada de la misma forma en el kicillofismo, donde desconfían, en forma permanente, de cada una de las negociaciones de la que es parte el cristinismo. “Nos corren el arco todo el tiempo. A la mañana dicen una cosa, a la tarde otra y a la noche una nueva”, se quejó un importante funcionario platense.
En el Gobierno bonaerense y en el Movimiento Derecho al Futuro (MDF) hay una desconfianza permanente sobre cada movimiento del cristinismo. Tiene que ver con que, en el fondo, advierten que la relación política está rota y que nadie de esa tribu quiere que Kicillof sea el candidato a presidente del peronismo ni que se convierta en el sucesor de Cristina Kirchner.
Kicillof en la presentación del Presupuesto 2026
Si no quieren el objetivo de fondo, tampoco van a querer el objetivo a corto plazo. Entonces, el desgaste de la gestión estará siempre presente como una postura del cristinismo para con el kicillofismo. “Quieren ver cuántos nos sacan, cuánto nos debilitan. Están jugando en tándem con algunos sectores de la oposición”, indicaron en una oficina importante de la gobernación.
Entre los intendentes hay una visión más moderada. Creen que no hay “temas sensibles“ sin cerrar y que este miércoles el peronismo llegará con una posición unificada. La clave, entonces, será buscar los votos en los sectores más blandos de la oposición.
La vocación de cerrar acuerdos va a contramano de los sentimientos que atraviesan la relación política entre el kicillofismo y La Cámpora. No se eligen, no se quieren, pero el contexto y las necesidades de ambas partes los lleva a tener que buscar un punto de acuerdo forzado.
En una llamada, de menos de 15 minutos, el presidente de Estados Unidos le dijo al líder del régimen chavista que tenía una semana para abandonar Venezuela con su familia. Ese plazo habría expirado el viernes, según dos fuentes
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, se está quedando sin opciones para dimitir y salir de su país bajo un salvoconducto garantizado por Estados Unidos, tras una breve llamada con el presidente estadounidense, Donald Trump, el mes pasado, donde el presidente rechazó una serie de solicitudes del líder venezolano, según cuatro fuentes informadas sobre la llamada.
El llamado, del 21 de noviembre, se produjo después de meses de creciente presión estadounidense sobre Venezuela, incluidos ataques contra presuntos barcos de tráfico de drogas en el Caribe, reiteradas amenazas de Trump de extender las operaciones militares a tierra y la designación del Cártel de los Soles, un grupo que la administración Trump dice incluye a Maduro, como una organización terrorista extranjera.
Maduro y su gobierno siempre han negado todas las acusaciones criminales y dicen que Estados Unidos está buscando un cambio de régimen para tomar el control de los vastos recursos naturales de Venezuela, incluido el petróleo.
Maduro le dijo a Trump durante la llamada que estaba dispuesto a abandonar Venezuela siempre que él y sus familiares tuvieran una amnistía legal completa, incluida la eliminación de todas las sanciones estadounidenses y el fin de un caso emblemático que enfrenta ante la Corte Penal Internacional, dijeron tres de las fuentes.
Maduro le dijo a Trump durante la llamada que estaba dispuesto a abandonar Venezuela siempre que él y sus familiares tuvieran una amnistía legal completa (REUTERS)
También solicitó el levantamiento de las sanciones a más de 100 funcionarios del gobierno venezolano, muchos de ellos acusados por Estados Unidos de abusos a los derechos humanos, tráfico de drogas o corrupción, según las tres personas.
Maduro pidió a la vicepresidenta Delcy Rodríguez dirigir un gobierno interino de cara a nuevas elecciones, según dos de las fuentes.
Trump rechazó la mayoría de sus solicitudes en la llamada, que duró menos de 15 minutos, pero le dijo a Maduro que tenía una semana para salir de Venezuela al destino de su elección junto con sus familiares.
Ese pasaje seguro expiró el viernes, lo que llevó a Trump a declarar el sábado que el espacio aéreo de Venezuela estaba cerrado, dijeron dos de las fuentes. El Miami Herald informó previamente varios detalles de la llamada. La fecha límite del viernes no se había revelado previamente.
Trump confirmó el domingo que había hablado con Maduro, sin proporcionar detalles. La Casa Blanca se negó a dar más detalles, y el Ministerio de Información de Venezuela, encargado de todas las consultas de prensa del gobierno, no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios.
Maduro pidió a la vicepresidenta Delcy Rodríguez dirigir un gobierno interino de cara a nuevas elecciones, según dos de las fuentes (REUTERS)
El gobierno de Trump ha declarado que no reconoce a Maduro, en el poder desde 2013, como presidente legítimo de Venezuela. Maduro se proclamó reelegido el año pasado en unas elecciones nacionales que Estados Unidos y otros gobiernos occidentales calificaron de farsa y que, según observadores independientes, obtuvo una victoria abrumadora de la oposición.
El lunes, al dirigirse a los manifestantes, Maduro juró “absoluta lealtad” al pueblo venezolano.
No está claro si Maduro aún puede presentar una nueva propuesta que incluya un salvoconducto. Trump se reunió este lunes con sus principales asesores para abordar la campaña de presión sobre Venezuela, entre otros temas, según informó un alto funcionario estadounidense.
Una fuente con sede en Washington informada sobre las discusiones internas de la administración Trump no descartó la posibilidad de una salida negociada de Maduro, pero enfatizó que aún quedan desacuerdos significativos y detalles importantes sin resolver.
La recompensa millonaria por la captura del dictador Nicolás Maduro
Estados Unidos ha aumentado a 50 millones de dólares la recompensa por información que conduzca al arresto de Maduro y ofrece 25 millones de dólares por otros altos funcionarios del gobierno, incluido el ministro del Interior, Diosdado Cabello, acusado en Estados Unidos de presunto narcotráfico, entre otros delitos. Todos han negado las acusaciones.
La administración de Maduro ha solicitado otra llamada con Trump, según las tres fuentes.
El oficialismo podría presentar un bloque de 94 miembros. Mientras, busca que los gobernadores le quiebren la bancada al peronismo
El mundo libertario se encamina a tener el primer festejo parlamentario con la nueva composición del Congreso de la Nación.
Luego del fallido intento por Lorena Villaverde en el Senado, el bloque de LLA tendrá algo para mostrar a la exigente Casa Rosada que solo quiere triunfos y no perdona derrotas. Por estas horas estará ingresando el documento que lleva la firma de Gabriel Bornoroni con el listado de los legisladores que conformarán el bloque de LLA y se quedaría con la primera minoría de laCámara de Diputados.
“En solo 4 años pasamos de dos diputados –Javier Milei y Victoria Villarruel– a ganar la presidencia y sumar 94, 95 diputados” señala, exultante, un diputado de LLA que va a empezar a transitar su tercer año de mandato en pocos días.
Mientras la oposición buscaba reorganizarse y trabajaba sus propias versiones de los proyectos de reformas, el oficialismo se dedicó a salir de caza por el recinto y se llevó en solo un mes más de 14 diputados.
Al término de la elección, el bloque de LLA iba a estar conformado por 79 legisladores. Hubo un principio de conversación con el PRO por un interbloque y el partido amarillo aseguró que iba a apostar por la independencia. Luego de esa decisión, y antes de que comenzara noviembre, se fueron Damián Arabia, Sabrina Ajmechet, Laura Rodríguez Machado, Patricia Vásquez y Silvana Giuidici. Luego se sumaron Marilú González Estevarena, Belén Avico, Carlos Almena y en las últimas horas Verónica Razzini y Alejandro Bongiovanni.
Verónica Razzini junto a Patricia Bullrich y Martín Menem
A este grupo se le sumó el bloque de los radicales con peluca con el tucumano Mariano Campero, el cordobés Luis Picat y el correntino Federico Tournier. Hasta acá, los libertarios sumaban 91 diputados.
Pero los pases no parecen haber terminado y en las últimas horas los libertarios apuestan a sumar entre tres y cuatro diputados más y, por otro lado, incentivan a los gobernadores peronistas no kirchneristas para que se vayan del bloque de UP y armen uno nuevo.
En lo que se refiere a posibles incorporaciones al mundo libertario, se espera la llegada de José Nuñez y de Lorena Petrovich, ambos del PRO. Esta última asumirá para completar el mandato de Silvia Lospennato y todos tienen en Patricia Bullrich su terminal política.
De completarse todos estos pases, el bloque que conduce el cordobés Gabriel Bornoroni llegará a la sesión preparatoria con 94 diputados.
Ese número los dejaría a las puertas de arrebatarle al peronismo la primera minoría y ya sin “peceras” a dónde ir a pescar, la estrategia libertaria se concentró en “empujar” a los gobernadores peronistas a romper el bloque en el Congreso. Principalmente al catamarqueño Raúl Jalil que viene amagando desde hace tiempo con retirar a sus legisladores del bloque de UP.
El peronismo logró contener en las urnas la cantidad de legisladores y el 27 de octubre el bloque que conduce Germán Martínez amaneció con 98 integrantes.
El gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, y el de Tucumán, Osvaldo Jaldo (NA)
Pero al poco tiempo el tucumano Javier Noguera anunció que no iba a asumir en el bloque y se iba a Independencia, el bloque del gobernador de esa provincia, Osvaldo Jaldo. Un camino similar seguiría el diputado por San Luis, Jorge “Gato” Fernández.
Pero lo que busca el oficialismo es que los cuatro diputados catamarqueños que responden todos al gobernador Raúl Jalil; o los siete santiagueños que responden a Gerardo Zamora.
“No necesitamos que los gobernadores rompan, necesitamos que uno solo lo haga, con eso nos alcanza”, reconoció un libertario que transita los pasillos de Diputados.
Las negociaciones se mantienen. El oficialismo promete a los gobernadores vía el ministro del Interior, Diego Santilli, y la oposición les recuerda que en dos años no les cumplieron la promesa.
“No sé que van a hacer los catamarqueños, lo que sí te adelanto es que los santiagueños están adentro” aseguró una alta fuente del bloque del peronismo en Diputados.
Los bloques tienen tiempo hasta hoy para presentar su conformación por lo que las negociaciones continuarán durante toda la jornada. En el oficialismo la expectativa es la de pegar el “zarpazo” y quedar como la primera minoría que, más allá del título, los deja muy bien posicionados para lo que será el reparto de las sillas en las comisiones; y con una posición de fortaleza que habrá que ver cómo se traduce en el recinto.