El S&P Merval ganó 0,6% y los ADR en Wall Street avanzaron hasta 4,6%. En octubre hubo acciones que escalaron hasta 30% en dólares. Los bonos cayeron por tercer día, pero cerraron el balance mensual con alza de 13%. El dólar libre subió a $1.190 y el BCRA compró USD 19 millones en el mercado.
Octubre dejó un saldo favorable para acciones y bonos argentinos.
Los negocios bursátiles concluyeron el mes de octubre con un apreciable balance positivo, más allá de ajustes coyunturales con la volatilidad de las últimas sesiones, debido al impulso de fondos provenientes del exitoso blanqueo de capitales -cuya primera etapa fue extendida hasta el 8 de noviembre- e indicadores que alentaron las esperanzas de recuperación para la economía en 2025.
La regularización de dinero no declarado previamente sumó unos USD 18.000 millones, según adelantó el vocero presidencial Manuel Adorni, en una primera etapa para fondos en efectivo del plan de amnistía fiscal.
El índice líder S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires cerró este jueves con alza de 0,6%, en los 1.848.744 puntos, muy cerca de su reciente récord nominal. A lo largo de octubre el panel de acciones líderes anotó una ganancia de 8,9% en pesos, y de 17% en dólares, según la paridad del “contado con liquidación”, que tocó un piso desde el 20 de mayo.
Las mejoras en la Bolsa se dieron a la par de un arrollador desempeño de los ADR argentinos en Nueva York. En esta rueda destacó la ganancia de Edenor (+4,6%), para acumular en octubre una mejora en dólares del 31,3 por ciento. La apuesta más ganadora fue Banco Francés, cuyo ADR trepó un 32,6% mensual, mientras que Banco Supervielle mejoró un 28,1 por ciento.
Fuente: Rava Bursátil-precios en dólares.
“Pasando a analizar el rendimiento en pesos de los activos argentinos, las mejores empresas del mercado local durante este mes fueron BBVA Francés, que registró una suba del 20,8% en pesos, seguida por Edenor con una suba 18,3% y cierra el podio el Grupo Supervielle, con una suba del 14%”, indicó Maximiliano Donzelli, Manager de Estrategias de Inversión de IOL (InvertirOnline).
Con una baja promedio de 1%, los bonos hard dollarcayeron por tercera sesión consecutiva, pero en el balance mensual promediaron un destacado beneficio del 13% en promedio. Un reacomodamiento de carteras con el final mensual también disparó ventas en bonos soberanos en el MAE (Mercado Abierto Electrónico), los que promediaron una corrección en pesos del 1% diario, pero arrojaron alza del 7,2% en octubre.
El riesgo país argentino se redujo en octubre en unos 300 puntos básicos, para quedar debajo de los 1.000 puntos por primera vez desde agosto de 2019
Los expertos de GMA Capital explicaron que “la deuda Hard-Dollar argentina no perdió su rol estelar en los mercados internacionales. Está viviendo un octubre más que interesante, con ganancias promedio de 13% en el marco pletórico de euforia por Globales. Estas subas marcaron un hito importante: el quiebre de 1.000 puntos del riesgo país, algo no visto desde antes de las PASO de 2019. Así, al superar los precios los últimos máximos de marzo de este año (en torno a USD 50 promedio), se dejó bien atrás los niveles que le siguieron al canje de 2020″.
“Cerramos el mes de octubre con una continuación de lo que fue el rally de la deuda soberana argentina en septiembre. Los bonos más largos tuvieron un excelente mes con variaciones positivas en torno al 17%, mientras que los títulos cortos con vencimiento en 2029 y 2030 subieron un 10%. Al contrario de lo que fue el mes anterior, los fundamentos de este rally los encontramos en factores locales; el viento internacional pareció torcerse en contra allá por finales de septiembre, y esto se vio reflejado en la variación de -2,4% que tuvieron los bonos emergentes”, precisó Maximiliano Donzelli.
El riesgo país de JP Morgan subía 27 unidades para la Argentina, a 984 puntos básicos a las 17:40 horas, solo dos días después de haber perforado a la baja la línea de los 900 puntos (piso intradiario de 893 unidades) por primera vez desde el 9 de agosto del 2019. A lo largo de octubre el riesgo país descendió más de 300 puntos básicos o un 23,7 por ciento.
“La baja en los activos del jueves es saludable para el mercado ya que oxigena precios, para un octubre a ser recordado por los altos rendimientos que se obtuvieron en todos los renglones financieros, liderados incluso por las obligaciones negociables de las empresas” (privadas), dijo a Reuters un asesor financieros de Bull Market Brokers. “El blanqueo ayuda a dinamizar la economía, con el aliciente que hay tiempo hasta abril para traer plata al sistema”, acotó.
El superávit fiscal, la baja en la inflación, el apoyo monetario de organismos internacionales, alta aceptación del blanqueo de capitales y respaldo para las reservas del BCRA generaron un clima propicio para los inversores, con precios de acciones y bonos en máximos desde 2018 y 2020, respectivamente, medidos en dólares. “El contexto genera buenas expectativas pese a los graves problemas que aún sufre la economía real, que atraviesa un estancamiento con una inflación aún alta que ha incrementado el desempleo y la pobreza”, puntualizó Reuters.
Récord de compras del BCRA en octubre
El volumen negociado en el mercado mayorista recortó este jueves unos USD 140 millones respecto del día anterior, con unos USD 296 millones operados en el segmento de contado. El Banco Central se alzó con USD 19 millones por su habitual participación cambiaria.
De esta forma, el BCRA absorbió en el mes un total de USD 1.648 millones, en el octubre más positivo para la participación oficial en el mercado, por encima del registro de 2009, cuando en el décimo mes compró un saldo neto de 1.476 millones de dólares.
Por el lado de las reservas internacionales hubo una importante caída de USD 1.262 millones, a 28.617 millones de dólares. A lo largo de octubre, las reservas brutas del Central crecieron en 1.450 millones de dólares.
Fuentes de la entidad monetaria detallaron a Infobae que la baja de la última rueda operativa del mes se debió a la salida de dólares del sistema que se efectúa cada fin de mes, para adecuarse a la regulación que limita la posición global neta de moneda extranjera en cartera propia de los bancos. Estas divisas retornan al sistema con el inicio del mes siguiente.
Asimismo, se cancelaron cerca de USD 200 millones por el vencimiento de Bopreal (Bonos para la Reconstrucción de una Argentina Libre). Por otro lado, la caída de la cotización del oro (-1,5% en el día) y otras monedas redundó en una baja de reservas por unos 80 millones de dólares.
Ahora, hasta el 8 de noviembre irá la primera etapa del proceso de blanqueo con un canon impositivo del 5% para las declaraciones bancarias por sobre los 100.000 dólares, porcentaje que aumentará al 10% y 15% para fin de enero y abril próximos. Los depósitos bancarios en dólares rondan los casi 32.500 millones entre inversores privados, según la proyección de analistas, y retomaron así sus niveles más altos en algo más de cinco años.
El dólar libre ganó diez pesos o 0,9% este jueves, para cerrar ofrecido a $1.190 para la venta. El billete informal registró en octubre una caída de 45 pesos o 3,6%. Con un dólar mayorista que ascendió dos pesos en la rueda, a $992, la brecha cambiaria se ajustó a 20 por ciento. El tipo de cambio oficial acumuló una ganancia a o largo del mes de 21,50 pesos o un 2,2 por ciento.
“En materia de variables financieras, pese a la caída desde máximos que vienen mostrando el Merval y los bonos en dólares, la tónica del mercado aún sigue siendo positiva. El dólar contado con liquidación se mantiene estable y cierra octubre con la cuarta caída mensual consecutiva en términos reales. El mercado cambiario sigue calmo, y los inversores apuestan a que el gobierno podrá evitar turbulencias, lo que lleva también a que se corrijan a la baja las expectativas de inflación hacia adelante desde las expectativas que se tenían meses atrás”, refirió Juan Manuel Franco, economista Jefe del Grupo SBS.
El 1,5% de mayo fue más bajo respecto a los pronósticos previos, pero será difícil que se repita este mes, porque se registra un repunte en alimentos. Caputo sacó rédito a su política de privilegiar la desinflación por sobre el fortalecimiento de reservas
La abrupta caída de la inflación de mayo a 1,5%, el menor registro en cinco años, representa un triunfo para la estrategia elegida por el ministro de Economía. Luis Caputo privilegió la estabilidad cambiaria y el estricto control de los agregados monetarios por sobre la acumulación de reservas. El objetivo de esta política fue justamente poner como prioridad la desaceleración de precios, reflejado ayer en los datos divulgados por el INDEC.
El objetivo cada vez más explícito del Gobierno es mostrar el éxito alcanzado en la lucha contra la inflación. Y sobre todo transmitir que el ajuste fiscal y el control del gasto público finalmente tienen su premio.
Lo más destacado del dato conocido ayer es que el rubro alimentos y bebidas subió apenas 0,5%, mientras que la canasta alimentaria cayó 0,4%. Se trata de datos claves, ya que la desaceleración de precios en este segmento impacta positivamente en la base de la pirámide social. Son las familias de menores ingresos las que más se ven favorecidas, teniendo en cuenta que la mayor parte de su gasto se dedica a compras en supermercados y autoservicios.
Aún con todo lo positivo, el dato de mayo tuvo algunas señales amarillas. Por un lado, la fuerte desaceleración en alimentos se explicó por fuertes caídas de precios en frutas y verduras, algo que difícilmente se repita hacia adelante. Por otra parte, la inflación núcleo -que excluye productos regulados y estacionales- se mantuvo bastante más arriba, arrojando un 2,2%.
La inflación de servicios también se ubicó bien por encima de la promedio, llegando a 2,7%, reflejando el impacto real de los ajustes de precios sobre la clase media. Aquí entran tarifas de servicios públicos, alquileres, Internet, prepagas, restaurantes y cuotas de colegios, entre otros rubros.
Con estos datos, la pregunta razonable es si semejante caída de la inflación es sostenible en los próximos cuatro meses, es decir en la previa electoral.
Existe una probabilidad alta que se mantenga efectivamente por debajo del 2% mensual. Sin embargo, es menor claro que se pueda mantener la tendencia descendente desde los niveles actuales en los próximos meses.
La consultora LCG, por ejemplo registró un fuerte repunte en alimentos en la segunda semana de junio, con incrementos de 1,7% tras haber registrado estabilidad de precios en la primera semana. Entre los productos que lideran las subas hay varios de la canasta básica: aceites aumentaron 5,9%, verduras 4% (tras la caída de junio) y carnes 1,3%. La inflación promedio para las últimas cuatro semanas en este rubro fue de 1,6%, bien por encima del registro de mayo.
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Por lo tanto, no será fácil que este mes se mantenga un nivel similar al de mayo, pero sí existe una probabilidad alta de que se mantenga por debajo del 2%. La probabilidad de que este comportamiento se mantenga hasta la medición de septiembre también aumentó considerablemente.
La expectativa del Gobierno es que mantener la inflación en niveles acotados sea clave para conseguir un buen resultado electoral en octubre. Javier Milei siempre tuvo claro que la principal demanda de la sociedad cuando asumió era la reducción de la inflación, que pasó del 25,5% en diciembre de 2023 (producto de la devaluación) a solo 1,5% en la última medición.
Que la baja se explique sobre todo en la mayor estabilidad registrada en alimentos también es una buena noticia para la Casa Rosada, ya que el impacto se siente en sectores populares, históricamente más cercanos al peronismo o al kirchnerismo.
Por supuesto que por delante quedan muchos desafíos, en particular consolidar la reactivación para que se transforme en crecimiento genuino. También la necesidad de crear puestos de trabajo para al menos compensar la destrucción de empleo de sectores como las pymes industriales. Pero posiblemente esto sean temas que figurarán en las demandas de los próximos dos años, ya pensando en la elección presidencial de 2027.
La magnitud de la inundación que afectó a las ciudades de Bahía Blanca y General Daniel Cerri impactó a toda la comunidad y también dañó gravemente al Complejo Industrial, uno de los pilares productivos de la trasportadora de gas
Después de la inundación y la tragedia que sufrió la ciudad bonaerense de Bahía Blanca, y tras tres meses de trabajo intenso e ininterrumpido, la trasportadora de gas TGS anunció que su Complejo Cerri se encuentra nuevamente 100% operativo.
Se trata de una planta cuya principal actividad es la producción de líquidos derivados del gas natural —etano, propano, butano y gasolina natural— con una capacidad anual superior a 1.050.000 toneladas. “Además, allí, se realiza el fraccionamiento y envío de estos líquidos por ductos hacia la Planta Galván, también de tgs, donde se almacenan antes de su despacho al mercado local y regional”, explicaron desde la empresa cuyo 51% pertenece en partes iguales a Pampa Energía y a un grupo de inversores liderado por la familia Sielecki.
“En nombre de todo TGS, quiero agradecer profundamente a nuestros colaboradores, proveedores, contratistas, vecinos y a toda la comunidad de Bahía Blanca por su apoyo incondicional y su compromiso durante estos meses. Lo que logramos en este tiempo récord no solo demuestra capacidad técnica, sino también una enorme vocación de servicio, solidaridad y sentido de pertenencia. Gracias a todos por ayudarnos a poner nuevamente de pie una instalación clave para la energía del país, luego de lo tristemente sufrido”, afirmó Oscar Sardi, CEO de TGS.
Oscar Sardi, CEO de TGS, en el centro, acompañado por los accionistas Marcelo Mindlin (Pampa Energía) y Daniel Sielecki, en octubre del 2024, en el NYSE de Nueva York, cuando se celebraron los 30 años de cotización de la empresa en Wall Street
Desde la compañía energética destacaron que para la recuperación, trabajaron no solo colaboradores de TGS provenientes de distintos puntos del país, sino también más de 150 proveedores y contratistas de servicios y materiales, cuyo trabajo coordinado y compromiso resultaron clave para la recuperación del complejo.
“A pesar de la magnitud del evento climático y del hecho de que el complejo alberga dos plantas compresoras esenciales para el sistema de transporte de gas natural, TGS nunca interrumpió la provisión del servicio. Gracias a una rápida respuesta operativa y a la implementación de maniobras extraordinarias, la compañía logró mantener la continuidad del suministro con los más altos estándares de seguridad, garantizando así el abastecimiento de gas natural en todo momento”, cerró el comunicado de TGS.
El Ejecutivo eliminó barreras para la operación de fondos internacionales con títulos públicos y redujo las condiciones para el retiro de divisas
El Gobierno nacional avanzó con un nuevo paquete de medidas orientadas a estimular la entrada de divisas mediante la flexibilización de normas que hasta ahora limitaban la operatoria de capital extranjero en el mercado financiero local. Las decisiones, tomadas en simultáneo por la Comisión Nacional de Valores (CNV) y el Banco Central (BCRA), apuntaron a facilitar tanto el ingreso como el egreso de fondos especulativos de corto plazo que inviertan en instrumentos de deuda emitidos por el Tesoro Nacional.
Desde el lado regulatorio, la CNV publicó la Resolución General N.º 1068, por la cual se amplió el conjunto de excepciones al límite diario de $200 millones que regía para transferencias al exterior de valores negociables por parte de inversores no residentes. A partir de esta disposición, esa restricción dejó de aplicarse en casos en los que se trate de bonos del Tesoro con vencimiento igual o mayor a 180 días desde su fecha de emisión y que hayan sido adquiridos en colocación primaria, siempre hasta el valor nominal suscripto.
El presidente del organismo, Roberto Silva, indicó que esta medida se enmarca en una política general de remoción de trabas al funcionamiento del mercado de capitales. Según el comunicado oficial, la CNV buscó avanzar con la normalización de operaciones y acompañar la estrategia general del Ejecutivo nacional, que prioriza el financiamiento en moneda extranjera sin intervención directa del Banco Central.
En paralelo, el BCRA confirmó que eliminará el plazo mínimo de permanencia de 180 días para los fondos del exterior que ingresen al país y participen en operaciones en el Mercado Libre de Cambios (MLC) o en licitaciones primarias de títulos públicos del Ministerio de Economía. Esta condición, vigente desde abril de este año tras la Comunicación “A” 8230, había sido parcialmente modificada en mayo con la Comunicación “A” 8245 para permitir la suscripción del Bonte 2030 en dólares. Ahora, la permanencia mínima se suprime completamente.
El presidente del BCRA, Santiago Bausili, explicó que la decisión respondió a una revisión del esquema de restricciones cambiarias vigente. Consideró que el “cepo” aplicado desde 2019 había dejado de cumplir su función original y se transformó en un obstáculo para el ingreso de nuevos fondos. Según declaraciones públicas, el funcionario sostuvo que los inversores que querían salir ya lo habían hecho y que actualmente no existían trabas relevantes que justificaran mantener el régimen anterior.
El Bonte 2030, con tasa elevada y suscripción en dólares, se volvió una herramienta central para el financiamiento del Tesoro y la compra de dólares para las reservas (Reuters)
Estas modificaciones se dieron en un contexto de estrategia coordinada entre la autoridad monetaria y el Ministerio de Economía, orientada a reforzar las reservas internacionales mediante el ingreso de divisas del exterior. Para ello, el equipo liderado por Luis Caputo activó dos mecanismos: por un lado, la firma de un acuerdo de financiamiento tipo REPO con siete bancos internacionales por un monto de US$2.000 millones; por el otro, una nueva licitación del Bonte 2030, que permite suscripción en dólares por parte de inversores locales y extranjeros.
El llamado a licitación se programó para el viernes 13 de junio y apuntó a captar US$500 millones, la mitad del monto obtenido en la primera colocación de abril, que se orientó exclusivamente a no residentes. En esta oportunidad, tanto residentes como no residentes pudieron participar en la oferta, lo que amplió el universo potencial de suscriptores.
En su debut, el Bonte 2030 ofreció una tasa del 29,5%, superior a las expectativas de mercado. Esta rentabilidad, combinada con la eliminación de las restricciones de salida, representó un atractivo importante para los fondos internacionales, que encontraron mejores condiciones para operar en el mercado local. Además, se estableció un límite mensual de US$1.000 millones para este tipo de colocaciones, lo que permitió mantener cierto grado de control sobre los flujos.
El secretario de Finanzas, Pablo Quirno, confirmó que el menú de la licitación incluiría además letras capitalizables con vencimientos en julio, agosto, septiembre y noviembre, orientadas a captar el interés de fondos comunes de inversión. Asimismo, se pusieron en oferta dos Bonos Capitalizables (BONCAP) con vencimientos en enero y junio de 2026.
Desde el Ministerio de Economía, el subsecretario de Política Económica, José Luis Daza, consideró que estas decisiones formaban parte de un plan para anticipar el regreso a los mercados voluntarios de deuda con legislación extranjera. En declaraciones a medios, sostuvo que el programa económico avanzaba mejor de lo previsto y que la colocación de instrumentos en moneda dura reflejaba ese ritmo.
Por otro lado, el Tesoro anunció que a partir de este mes se publicará un cronograma anual de licitaciones de deuda pública. Esta medida apunta a brindar previsibilidad y permitir que los agentes financieros planifiquen su participación de forma más ordenada, tanto en moneda local como extranjera.
El objetivo del Gobierno nacional consistió en asegurar un flujo constante de divisas que le permita reforzar las reservas internacionales, cumplir los compromisos asumidos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y enfrentar el segundo semestre sin sobresaltos financieros. En este período, se proyecta una baja en la liquidación de exportaciones agroindustriales, así como un aumento en la dolarización de portafolios minoristas en vísperas del calendario electoral.
Diversos analistas interpretaron que la relajación de controles podría facilitar el ingreso de capitales de corto plazo que busquen aprovechar el diferencial de tasas. Al mismo tiempo, advirtieron sobre la posibilidad de que esos flujos generen mayor volatilidad en caso de una salida masiva o imprevista. Aunque destacaron que estas medidas podían ayudar a sostener el tipo de cambio en el corto plazo, también consideraron que podrían consolidar un nivel mínimo más alto para el dólar.
Con esta serie de anuncios, el Gobierno argentino consolidó una estrategia de financiamiento basada en el mercado voluntario local, con foco en la emisión de instrumentos que puedan ser suscriptos en dólares y liquidados en pesos. El desafío de las próximas semanas será evaluar la respuesta del mercado y la capacidad del esquema para sostener la acumulación de reservas sin necesidad de intervención directa del BCRA.