Salud
Envejecimiento: cuáles son los cambios drásticos en el cuerpo a los 40 y 60 años
Publicado
10 meses atráson
Por
Admin
Una investigación comprobó que miles de moléculas y microbios se modifican de manera abrupta en dos periodos específicos de la vida. Este fenómeno podría explicar el aumento de enfermedades y mayores riesgos para la salud. Las recomendaciones de un experto para hacerles frente
Las señales de envejecimiento se hacen sentir de un día para el otro. Por ejemplo, una gripe difícil de superar, dolores articulares o un sueño poco profundo. Pareciera que de golpe el cuerpo empezara a “fallar” y según un nuevo estudio esta no es solo una sensación. Una investigación de Stanford Medicine demostró que muchas de las moléculas y microorganismos del cuerpo aumentan o disminuyen drásticamente en número durante los 40 y 60 años.
“No estamos cambiando gradualmente con el tiempo; hay algunos cambios realmente dramáticos”, dijo el doctor Michael Snyder, autor principal del estudio. “Resulta que a mediados de los 40 es un momento de cambios drásticos, al igual que a principios de los 60. Y eso es cierto sin importar qué clase de moléculas se observen”.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/HMWT7D36KRGXJKIMJIGOLEJFIE.jpg 420w)
“El envejecimiento es un proceso biológico complejo, que implica una serie de cambios graduales y acumulativos en las células, tejidos y sistemas del cuerpo. Estos cambios incluyen la acumulación de daño en el ADN, la disminución de la función mitocondrial, la inflamación crónica de bajo grado (que aumenta en la obesidad), y la alteración en la regeneración celular. Aunque los signos externos del envejecimiento, como las arrugas o la pérdida de masa muscular, pueden comenzar a notarse a diferentes edades, estudios sugieren que algunos procesos de envejecimiento celular pueden iniciarse ya a los 30 años”.
El médico expresó que las investigaciones actuales han identificado que el rango entre los 40 y los 60 años es un momento crucial en el que el cuerpo experimenta cambios biomoleculares significativos. “A los 40 años, se observan cambios en el perfil metabólico, hormonal y en la composición del microbioma intestinal (cantidad, calidad y diversidad de las bacterias que conviven en nuestro aparato digestivo). A los 60 años, se evidencia un incremento en la disfunción inmunológica y un riesgo más elevado de enfermedades crónicas como las cardiovasculares y neurodegenerativas”, señaló el doctor Ércoli.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/UA32EZQ7LBFQDPHCNWOP2AB2IU.jpg 420w)
El primer autor del estudio fue el doctor Xiaotao Shen, ex becario posdoctoral de Stanford Medicine. Shen es ahora profesor adjunto en la Universidad Tecnológica de Nanyang, Singapur.
Las dos edades claves
Según la investigación, estos grandes cambios impactan en la salud; la cantidad de moléculas relacionadas con las enfermedades cardiovasculares mostró modificaciones significativas en ambos momentos, y aquellas relacionadas con la función inmune cambiaron en personas de alrededor de 60 años.
El doctor Snyder, profesor de Genética de Stanford W. Ascherman, y sus colegas se inspiraron para estudiar la tasa de cambios moleculares y microbianos al observar que el riesgo de desarrollar muchas enfermedades relacionadas con la edad no aumenta de manera gradual con el paso de los años. Por ejemplo, los riesgos de padecer enfermedad de Alzheimer y enfermedades cardiovasculares aumentan drásticamente con la edad, en comparación con un aumento gradual del riesgo en los menores de 60 años.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/F4CHUGIUC5FKJBJG4IWDQPVAVE.jpg 420w)
Los investigadores utilizaron datos de 108 personas a las que habían estado siguiendo para comprender mejor la biología del envejecimiento. Los conocimientos anteriores de este mismo grupo de voluntarios del estudio incluyen el descubrimiento de cuatro “ageotipos” distintos, lo que demuestra que los riñones, el hígado, el metabolismo y el sistema inmunológico de las personas envejecen a ritmos diferentes en distintas personas.
El nuevo estudio analizó a participantes que donaron sangre y otras muestras biológicas cada pocos meses a lo largo de varios años; los científicos rastrearon muchos tipos diferentes de moléculas en estas muestras, incluidos ARN, proteínas y metabolitos, así como cambios en los microbiomas de los participantes. Los investigadores rastrearon los cambios relacionados con la edad en más de 135.000 moléculas y microbios diferentes, para un total de casi 250 mil millones de puntos de datos distintos.
Descubrieron que miles de moléculas y microbios experimentan cambios en su abundancia, ya sea aumentando o disminuyendo: alrededor del 81% de todas las moléculas que estudiaron mostraron fluctuaciones no lineales en número, lo que significa que cambiaron más en ciertas edades que en otros momentos. Cuando buscaron grupos de moléculas con los mayores cambios en cantidad, descubrieron que estas transformaciones ocurrieron más en dos períodos de tiempo: cuando las personas tenían alrededor de 40 años y cuando tenían alrededor de 60 años.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/WSNUPHCR7FBAVN3IALMTJ6AYGM.jpg 420w)
Aunque muchas investigaciones se han centrado en cómo aumentan o disminuyen las diferentes moléculas a medida que se envejece y en cómo la edad biológica puede diferir de la edad cronológica, muy pocas han analizado la tasa de envejecimiento biológico. El hecho de que se produzcan tantos cambios drásticos durante los primeros años de la sexta década de la vida tal vez no sea sorprendente, dijo Snyder, ya que se sabe que muchos riesgos de enfermedades relacionadas con la edad y otros fenómenos relacionados con ella aumentan en ese momento de la vida.
El gran conjunto de cambios que se produjeron a mediados de los 40 años sorprendió un poco a los científicos. Al principio, supusieron que la menopausia o la perimenopausia estaban provocando grandes cambios en las mujeres de su estudio, lo que afectaba a todo el grupo. Pero cuando desglosaron el estudio por sexo, descubrieron que el cambio también se estaba produciendo en los hombres de alrededor de 40 años.
“Esto sugiere que, si bien la menopausia o la perimenopausia pueden contribuir a los cambios observados en las mujeres de alrededor de 40 años, es probable que existan otros factores más significativos que influyan en estos, tanto en hombres como en mujeres. Identificar y estudiar estos factores debería ser una prioridad para futuras investigaciones”, afirmó Shen.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/M7A5UAYUFZH45OFGBY357YNDFA.jpg 420w)
Su influencia en la salud
En personas de 40 años, se observaron cambios significativos en la cantidad de moléculas relacionadas con el metabolismo del alcohol, la cafeína y los lípidos, las enfermedades cardiovasculares y la piel y los músculos. En personas de 60 años, los cambios estaban relacionados con el metabolismo de los carbohidratos y la cafeína, la regulación inmunológica, la función renal, las enfermedades cardiovasculares y la piel y los músculos.
Es posible que algunos de estos cambios estén relacionados con el estilo de vida o con factores de conducta que se concentran en estos grupos de edad, en lugar de estar impulsados por factores biológicos, dijo Snyder. Por ejemplo, una disfunción en el metabolismo del alcohol podría ser resultado de un aumento en el consumo de estas bebidas a mediados de los 40 años, un período a menudo estresante de la vida.
El equipo planea explorar los factores que impulsan estos grupos de cambios. Pero, sean cuales sean sus causas, la existencia de estos grupos indica la necesidad de que las personas presten atención a su salud, especialmente en los 40 y 60 años, dijeron los investigadores. Esto podría consistir en aumentar el ejercicio para proteger el corazón y mantener la masa muscular en ambas edades o disminuir el consumo de alcohol a los 40 años, ya que la capacidad para metabolizar el alcohol se ralentiza.
“Creo firmemente que deberíamos intentar ajustar nuestro estilo de vida mientras aún estamos saludables”, afirmó Snyder.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/5TQ2EP74TZGTJA5OCDUQI3BCVU.jpg 420w)
Cómo contrarrestar estos cambios
El doctor Ércoli explicó que es esencial implementar estrategias preventivas. “El ejercicio regular ha demostrado mejorar la función mitocondrial y reducir la inflamación sistémica, lo cual puede retrasar el envejecimiento biológico. Una dieta equilibrada, rica en antioxidantes y nutrientes esenciales, también es fundamental para proteger las células del daño oxidativo”.
Además, el experto señaló la importancia del manejo del estrés, la calidad del sueño, y la reducción del consumo de alcohol y tabaco, porque juegan roles fundamentales en la mitigación de los efectos del envejecimiento. “Finalmente, las intervenciones médicas personalizadas basadas en biomarcadores pueden ofrecer soluciones específicas para prolongar la salud durante el envejecimiento”, añadió el doctor.
Y agregó que las investigaciones sobre el envejecimiento y la promoción de la salud celular han informado que se obtendrían beneficios de los siguientes aspectos nutricionales y del estilo de vida, señaló el doctor Ércoli y brindó los siguientes consejos:
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/QFJ3OGDFIFEVXKHPUQP5U6BYCI.jpg 420w)
- Dieta mediterránea: rica en frutas, verduras, cereales integrales, pescado, aceite de oliva y baja en carnes rojas y productos lácteos, es reconocida por su capacidad para mejorar la salud cardiovascular y reducir el riesgo de enfermedades crónicas. “Su alto contenido en antioxidantes, ácidos grasos saludables y compuestos antiinflamatorios contribuye a la protección contra el envejecimiento celular y enfermedades neurodegenerativas. Además, la adherencia a esta dieta se asocia con una mayor longevidad y una mejor calidad de vida en la vejez”, afirmó el médico.
- Ejercicio físico regular: mejora la función mitocondrial y reduce el riesgo de enfermedades crónicas. “Es la base de cualquier conducta antienvejecimiento”, dijo Ércoli.
- Restricción calórica sin malnutrición: Reducir la ingesta calórica diaria en un 20-40% sin comprometer la ingesta de nutrientes esenciales, ha demostrado extender la vida útil en diversos modelos animales.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/CXCIPNGJENE5RE5FKPM2HB33HE.jpg 420w)
“La restricción calórica puede mejorar la salud metabólica, reducir la inflamación sistémica y disminuir la incidencia de enfermedades relacionadas con la edad, como diabetes tipo 2 y cáncer. Se cree que estos efectos se deben a la activación de vías celulares que promueven la reparación del ADN, la autofagia, y la resistencia al estrés oxidativo. Aunque los beneficios en humanos son prometedores, se necesitan más estudios clínicos para confirmar estos efectos” expresó el experto.
- Quercetina: Es un flavonoide con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. “Estudios han demostrado que puede inducir la senescencia celular, protegiendo las células del daño oxidativo y reduciendo la inflamación crónica. También se investiga su papel en la eliminación de células senescentes, lo que podría retardar el envejecimiento y mejorar la salud metabólica” señaló Ércoli.
- Resveratrol: Es un compuesto polifenólico presente en el vino tinto y algunas frutas. “Tiene propiedades antioxidantes y se ha vinculado con la activación de las sirtuinas, un grupo de proteínas que regulan el envejecimiento y la longevidad. El resveratrol también ha mostrado mejorar la sensibilidad a la insulina, reducir la inflamación, y proteger contra enfermedades neurodegenerativas en estudios preclínicos” indico el médico.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/KMXRJOTHCZAKVPVLORCC3XIO5Y.jpg 420w)
- Metformina: “Es un fármaco antidiabético que ha mostrado potencial para extender la vida útil en estudios preclínicos. Su indicación actual es para diabetes y su indicación bajo receta archivada la debe definir el médico de cabecera. No se recomienda la automedicación”, advirtió el experto.
- Polifenoles: como la curcumina (de la cúrcuma) y el EGCG (del té verde), que tienen propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
- Autofagia inducida por ayuno intermitente: “Promueve la eliminación de células dañadas y mejora la salud celular”, explicó el doctor.
- Suplementación con Omega-3: Beneficia la salud cardiovascular y cerebral.
Fuente: infobae
Te sugerimos
Salud
Un cardiólogo que estudia a los “superancianos” identifica el único hábito que garantiza vivir muchos años y con buena salud: “Es lo único que reduce nuestro reloj biológico”
Publicado
5 días atráson
4 junio, 2025Por
Admin
Tras analizar los factores que comparten los “superancianos”, el reconocido cardiólogo Eric Topol concluye que la longevidad depende, sobre todo, de una costumbre cotidiana
El doctor Eric Topol, cardiólogo y genetista estadounidense, lleva décadas investigando los secretos de la longevidad. Su reciente libro, Super Agers: An Evidence-based Approach to Longevity (Superancianos: una aproximación a la longevidad basada en pruebas), recopila los resultados de años de análisis sobre personas que superan los 80 años manteniendo la salud y la vitalidad. La publicación aún no ha salido en español, pero ya ha generado debate en foros especializados y en medios de comunicación de todo el mundo.
Pocas son las personas que consiguen cruzar la barrera de los 90 manteniéndose activos y en buena forma. Lejos de secretos inalcanzables o fórmulas mágicas, Topol defiende que la clave se encuentra “más cerca de lo que creemos” y apuesta por rutinas sencillas. En su recorrido profesional – es reconocido como uno de los diez principales expertos mundiales en longevidad -, el médico afirma que pequeños cambios diarios pueden prevenir enfermedades que encabezan la mortalidad global: cáncer, cardiopatías y trastornos neurodegenerativos.

El deporte es “lo único que sabemos que reduce nuestro reloj biológico”
“Sabemos que estas enfermedades tardan al menos 20 años en desarrollarse, así que estamos en condiciones de prevenirlas, sobre todo en personas con mayor riesgo”, afirma. “Tenemos una oportunidad de evitar esas patologías que surgen con la edad”. Para el especialista, modificar ciertos hábitos no supone un esfuerzo desmedido: “No se trata de pastillas ni de trucos mágicos. Podemos trabajar con lo que ya está en nuestras manos”.
El ejercicio – según Topol – destaca por encima del resto de recomendaciones. Basta con observar cómo se estructura la rutina diaria y plantear cambios sencillos en movimiento, dieta y ocio para encarrilar la salud a largo plazo. El cardiólogo recomienda especialmente aquellas actividades dirigidas a trabajar la musculatura en resistencia y los ejercicios de fuerza de prensión (la capacidad que tiene una persona para apretar o suspender objetos en el aire con las manos), dos prácticas que han mostrado una eficacia notable frente al deterioro físico vinculado al paso de los años.
“Resulta que el ejercicio es lo único que sabemos que reduce nuestro reloj biológico. El espacio entre tu verdadera edad y la edad biológica puede ampliarse”, destaca Topol. La recomendación estándar es realizar 30 minutos de ejercicio, cinco días a la semana, aunque el propio cardiólogo reconoce que incluso con dos sesiones semanales ya se obtienen beneficios. “No es sobre volverte más fuerte, es también sobre mejorar tu equilibrio”, insiste. “Nada de lo que podamos hablar supera al ejercicio si hablamos de reducir nuestro proceso de envejecimiento. No lo sabríamos si no hubiese toda esa ciencia detrás”.
Topol subraya que el ejercicio se ha revelado como el hábito más eficaz para mejorar la salud y prolongar la vida. Para quienes buscan una clave en la longevidad de los llamados “superancianos”, el mensaje queda claro: moverse no solo alarga los años, sino que también los llena de salud y vitalidad.
Salud
Qué es el síndrome del “hombro congelado”, la dolencia que afecta principalmente a las mujeres mayores de 40
Publicado
6 días atráson
3 junio, 2025Por
Admin
Durante la mediana edad, esta condición asociada a cambios hormonales interfiere con rutinas básicas y deteriora el bienestar general, advierten desde National Geographic. Cuáles son los síntomas y por qué es esencial el diagnóstico oportuno
Alcanzar el estante de la cocina, atarse el pelo o solo levantar los brazos pueden ser acciones que, aunque simples, se vuelven un desafío inesperado para muchas mujeres en la mediana edad, especialmente después de los 40 años.
Actualmente, esta condición ganó relevancia debido a su impacto prolongado y a la necesidad de repensar su diagnóstico y tratamiento desde una perspectiva informada y equitativa. Es que el dolor persistente y la rigidez en el hombro afectan de manera desproporcionada a mujeres de mediana edad, con una alta prevalencia e impacto en la calidad de vida.

El hombro congelado se caracteriza por una restricción progresiva y dolorosa del movimiento en la articulación, tanto en acciones activas como pasivas.
- Congelación: dolor y rigidez aumentan de forma progresiva.
- Congelada: disminuye el dolor, pero persiste la rigidez, lo que dificulta las actividades cotidianas.
- Descongelación: el rango de movimiento mejora de manera gradual.
Este proceso puede extenderse entre uno y tres años. En algunos casos, la recuperación total no se alcanza.
Vale destacar que, en la fase inicial, el dolor suele ser intenso por la noche y la movilidad del hombro se reduce. En la etapa intermedia, la rigidez se acentúa y puede producirse atrofia muscular. Finalmente, durante la recuperación, disminuye el dolor y mejora la movilidad, aunque no siempre se restablece por completo.
Desde Mayo Clinic advierten que, aunque en la mayoría de los casos se resuelven con el tiempo, la afección puede resultar incapacitante durante su evolución.
Cuáles son los factores de riesgo

Diversos reportes indican que entre el 2% y el 5% de la población desarrolla capsulitis adhesiva. Su frecuencia aumenta significativamente en mujeres de entre 40 y 60 años, especialmente en la transición menopáusica, profundiza National Geographic.
El mismo medio señala que cerca del 75% de los casos se presentan en mujeres, y más del 70% de quienes atraviesan la menopausia padecen síntomas musculoesqueléticos. Es más, una de cada cuatro desarrolla alguna forma de discapacidad funcional.
Aunque sus causas exactas no están completamente establecidas, se estima que el hombro congelado se origina por un proceso inflamatorio que provoca el engrosamiento y la contracción de la cápsula articular. Sobre este punto, el estudio de Climacteric vincula este mecanismo con la disminución de estrógenos durante la menopausia, lo que contribuye a la aparición de síntomas musculoesqueléticos como el dolor articular y la rigidez.
En cuanto a los factores de riesgo, Mayo Clinic identifica a los antecedentes de diabetes, trastornos tiroideos, enfermedades neurológicas o cardiovasculares, así como la inmovilización prolongada del hombro.
Vale destacar que la afección presenta mayor prevalencia entre personas de origen asiático, donde se la conoce como “hombro de los cincuenta años”, según relata National Geographic.

Por otro lado, un estudio publicado en Climacteric propuso el término “síndrome musculoesquelético de la menopausia” para describir síntomas asociados al descenso de estrógenos, como capsulitis adhesiva, artralgia y pérdida de masa muscular.
Al tiempo que una investigación publicada en Journal of Clinical Medicine documentó la alta frecuencia de dolor de hombro en mujeres menopáusicas y las barreras diagnósticas que enfrentan.
Contexto histórico y falta de investigación
Durante décadas, el hombro congelado fue una enfermedad poco comprendida y subestimada por la comunidad médica. National Geographic destaca que hasta hace poco existían escasos estudios sobre sus causas y tratamientos, en parte por un sesgo de género en la investigación.
La cirujana ortopédica Jocelyn Wittstein, citada por el medio, afirmó que “el solo hecho de ser mujer es un factor de riesgo para el hombro congelado” y señaló que la mayoría de los cirujanos ortopédicos no experimentan la menopausia, lo que contribuye a la falta de urgencia en el abordaje de esta afección.

En 2024, Wittstein y su equipo introdujeron el concepto de síndrome musculoesquelético de la menopausia, para describir síntomas como dolor articular, pérdida de masa muscular, disminución de densidad ósea y progresión de la osteoartritis. La revista Climacteric, en ese tono, subrayó la relevancia de esta terminología para aumentar la conciencia médica y social sobre los efectos musculoesqueléticos del climaterio.
Diagnóstico: criterios y relevancia de la detección temprana
Durante años, el hombro congelado fue poco atendido en la práctica clínica. National Geographic vincula esta omisión con un sesgo de género. En ese marco, Jocelyn Wittstein insistió en que el factor de riesgo de ser mujer fue históricamente desestimado y atribuyó esa omisión al desconocimiento clínico de la experiencia menopáusica.
Estas afirmaciones sobre el síndrome musculoesquelético en la menopausia adquirieron respaldo desde la revista Climacteric, ya que se documentó la frecuencia y el impacto de estos síntomas en mujeres en transición hormonal.
El estudio en Journal of Clinical Medicine reforzó esta perspectiva al mostrar la elevada prevalencia de dolor de hombro y la falta de estrategias diagnósticas eficaces, lo que prolonga el sufrimiento y retrasa el tratamiento adecuado.

Lo cierto es que el diagnóstico del hombro congelado es clínico. Se basa en la historia de dolor y rigidez progresiva, y en la limitación del rango de movimiento activo y pasivo. La Cleveland Clinic explica que el examen físico incluye la evaluación comparativa con el otro hombro.
Las radiografías permiten descartar patologías como artritis o lesiones óseas, y técnicas como la resonancia magnética o la ecografía ayudan a confirmar el diagnóstico.
Su identificación oportuna es clave. Intervenir en las primeras fases mejora el pronóstico y acorta la duración de los síntomas. Sobre este punto, y a modo de ejemplo, el estudio publicado en Journal of Ultrasound demostró que la hidrodilatación guiada por ecografía, combinada con fisioterapia, resulta más eficaz si se aplica antes de alcanzar la rigidez completa.
Tratamientos actuales y evidencia disponible
El tratamiento del hombro congelado evolucionó, aunque aún no hay un protocolo unificado. Las estrategias incluyen fisioterapia, analgésicos, antiinflamatorios no esteroideos, corticoides (orales o inyectables), hidrodilatación y, en casos refractarios (resistes a los tratamientos tradicionales), cirugía.
La fisioterapia es el pilar del abordaje conservador. Mayo Clinic y Cleveland Clinic coinciden en que los ejercicios de amplitud de movimiento, acompañados de un compromiso sostenido con la rehabilitación, son fundamentales para la recuperación.
Las infiltraciones con corticoides alivian los síntomas en las etapas iniciales, aunque su efecto es transitorio. La hidrodilatación —inyección intraarticular de solución salina y corticoides guiada por ecografía— mostró buenos resultados, especialmente al combinarse con fisioterapia personalizada.

El trabajo publicado en Climacteric cita estudios clínicos que muestran que estos tratamientos logran buenos resultados si se inician a tiempo, reduciendo la necesidad de intervenciones más invasivas.
Respecto a la terapia hormonal, National Geographic y la revista Climacteric señalaron que la terapia de reemplazo hormonal (TRH) podría prevenir o aliviar los síntomas musculoesqueléticos, incluido el hombro congelado.
La Dra. Kathleen Jordan, directora médica de Midi Health, afirmó a National Geographic que la TRH es una de las intervenciones más eficaces para el dolor articular vinculado al hipoestrogenismo, aunque debe evaluarse caso por caso.
Las opciones quirúrgicas quedan reservadas, entonces, a cuadros en los que el tratamiento conservador falla. El estudio de Journal of Clinical Medicine advirtió que muchas mujeres menopáusicas no acceden de forma temprana a tratamientos adecuados debido a la subestimación de su dolor, lo que retrasa intervenciones efectivas.

El reconocimiento del hombro congelado como parte del síndrome musculoesquelético amplió la investigación clínica y mejoró el enfoque terapéutico. National Geographic destacó, en ese sentido, que una nueva generación de especialistas en salud femenina favoreció el acceso a tratamientos basados en evidencia.
En paralelo, Climacteric resaltó el rol de intervenciones complementarias como el ejercicio de resistencia y la suplementación con vitamina D, magnesio y vitamina K2 para preservar la masa ósea y muscular en mujeres posmenopáusicas. La hidrodilatación guiada y la fisioterapia personalizada continúan como intervenciones de primera línea, sobre todo si se aplican en fases tempranas.
Salud
Andar en bicicleta o caminar, ¿qué es mejor para la salud cardiovascular?
Publicado
6 días atráson
3 junio, 2025Por
Admin
Ambas prácticas tienen múltiples beneficios para el organismo. En el Día Mundial de la Bicicleta, un repaso por sus efectos en la prevención de enfermedades cardíacas, control metabólico y fortalecimiento muscular
Cada 3 de junio se conmemora el Día Mundial de la Bicicleta, una iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que busca fomentar su uso por sus múltiples beneficios sociales, ambientales y de salud.
En 2025, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó un análisis al respecto de su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien apuntó: “Caminar y andar en bicicleta mejora la salud y hace que las ciudades sean más sostenibles. Cada paso que damos y cada paseo ayudan a reducir la congestión, la contaminación atmosférica y las enfermedades. No obstante, debemos hacer que los desplazamientos a pie y en bicicleta sean seguros, para que más personas opten por estas opciones más saludables y ecológicas”.

Caminar o andar en bici: sus beneficios para la salud cardiovascular
Tras analizar a 82.297 personas durante 18 años, el trabajo concluyó que “en comparación con los desplazamientos no activos, el uso de la bicicleta se asoció con un menor riesgo de mortalidad por todas las causas, un riesgo un 24% menor de hospitalización por enfermedades cardiovasculares, prescripción de medicación cardiovascular y prescripción por problemas de salud mental”. En cuanto a la caminata, el mismo estudio señaló que las personas “que caminaban al trabajo tenían un riesgo 10% menor de hospitalización por enfermedad cardiovascular y de recibir medicación para tratarla”.
Sin embargo, el trabajo también advirtió sobre un riesgo mayor de lesiones entre ciclistas: “Quienes se desplazaban en bicicleta tenían casi el doble de riesgo de hospitalización por colisiones de tráfico en comparación con los no activos, aunque este fue un evento relativamente infrecuente (83 hospitalizaciones en 18 años)”. Estos eventos reflejan la necesidad de infraestructuras seguras para garantizar los beneficios del ciclismo sin aumentar riesgos viales.

En 2022, la OMS publicó un informe en el que apuntó: “Andar en bicicleta y caminar puede ayudar a combatir el sobrepeso y reducir la inactividad física. Los desplazamientos activos se asocian con una disminución de aproximadamente el 10% del riesgo de enfermedad cardiovascular y una disminución del 30% del riesgo de diabetes tipo 2″.
Fortalecimiento muscular, según la intensidad que se busca
Tanto caminar como andar en bicicleta activan los músculos de las piernas. Según una revisión de Public Health England, “el ciclismo se asocia con mejoras en la composición corporal” y permite reducir el porcentaje de grasa corporal cuando se lo realiza con frecuencia.
El mismo informe destacó que andar en bicicleta “beneficia la capacidad cardiorrespiratoria en adultos”, lo que implica también un refuerzo de la musculatura involucrada en la resistencia aeróbica. Por su parte, caminar actúa sobre músculos estabilizadores, fortalece los tobillos y las caderas, y mejora el equilibrio, especialmente en personas mayores o con movilidad reducida. Además, se asocia con mejoras en la salud musculoesquelética de mujeres posmenopáusicas y personas con dolor lumbar crónico, según precisó el análisis.
Si bien el ciclismo podría promover un fortalecimiento más marcado debido a la carga mecánica del pedaleo, caminar también ofrece beneficios relevantes, particularmente en términos de mantenimiento de la masa muscular con bajo impacto en las articulaciones, de acuerdo a los expertos.
Bajar de peso: ambas son buenas alternativas
Ambas actividades son aliadas eficaces en estrategias de control del peso. La OMS ha indicado que caminar “durante 30 minutos o andar en bicicleta durante 20 minutos la mayoría de los días reduce el riesgo de mortalidad en al menos un 10%”.

En el informe de Public Health England detallaron que caminar con regularidad genera descensos en el índice de masa corporal, el perímetro de cintura y el peso, particularmente en personas inactivas o con sobrepeso. El ciclismo, por su parte, está significativamente asociado con una menor grasa corporal en estudios de cohorte y ensayos clínicos, lo que lo posiciona como una herramienta útil para reducir el exceso de peso.


Fin del plan Procrear: qué va a pasar con los créditos ya otorgados y con las viviendas que aún no están terminadas

Celulares, televisores y aires acondicionados: cuánto bajaron los precios y cómo incidirá en la inflación de junio

¿Pollos de exportación?: qué mercados asiáticos se reabrieron al ingreso de carne aviar de la Argentina

El colapso del Amazonas podría producirse “más rápido de lo que pensamos

La inflación anual de Estados Unidos trepó a 8,6% en mayo y es la más alta en 40 años

El Incucai condenó la propuesta de Javier Milei de permitir la venta de órganos

La respuesta de Cristiano Ronaldo sobre su futuro tras ser campeón con Portugal: qué dijo sobre la chance de jugar en River Plate

Caso Thiago Correa: el último adiós al nene de 7 años baleado en Ciudad Evita

Milei dio detalles de las medidas para liberar dólares del colchón: “Es como si fuera un blanqueo pero sin pago de impuestos”
Mas Leidas
-
Internacionales3 días atrás
Se acabó el amor: Elon Musk pidió el juicio político a Trump y la respuesta fue una amenaza de quita de subsidios
-
Nacionales3 días atrás
Pluriempleo y sobreocupación: las dos caras de la pérdida del poder adquisitivo y la precarización
-
Nacionales3 días atrás
Cayó en default Albanesi, uno de los grandes grupos energéticos del país
-
Sociedad3 días atrás
Eric Schmidt alerta sobre el avance imparable de la inteligencia artificial
-
Politica3 días atrás
Elecciones en Misiones: habrá varias opciones libertarias, el peronismo no presentará lista y un ex policía preso será candidato desde la cárcel
-
Sociedad3 días atrás
Sundar Pichai: “La IA es la tecnología más profunda en la que trabajará la humanidad”
-
Economia3 días atrás
Con menos controles y un “blindaje” fiscal, el Gobierno apuesta a hacer circular los dólares y reactivar la economía
-
Sociedad3 días atrás
Cómo recuperar fotos y videos eliminadas de la papelera del celular, paso a paso