Sociedad
Mordeduras de perro: por qué decidieron incluirlas en el Boletín Epidemiológico Nacional
Publicado
2 años atráson
Por
Admin
La decisión la tomó el Ministerio de Salud para contar con un registro. Es la agresión más frecuente de animales a personas. Los riesgos para la salud y qué hacer.
El Ministerio de Salud decidió empezar a incluir las lesiones por mordedura de perros en el Boletín Epidemiológico Nacional. La intención es contar con un registro de estas lesiones. Especialistas explican qué se sabe hasta ahora sobre el tema y qué hay que hacer ante una herida de estas características.
El anuncio lo hicieron en el Boletín de la semana epidemiológica 19 (del 7 al 13 de mayo) para concretar en la semana 20 (del 14 al 20 de mayo). La incorporación forma parte del apartado “Herramientas para la vigilancia, prevención y respuesta”.
“Continuando con la implementación del manual de normas y procedimientos de vigilancia y control de eventos de notificación obligatoria, desde la semana epidemiológica 20 de 2023 se encuentran habilitados en el Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud (SNVS) los eventos incluidos en el subgrupo lesiones no intencionales consensuados en la última actualización”, detallan en el Boletín.
Y señalan: “La lesión por mordedura de perro es la agresión más frecuente de los animales al ser humano. Este evento surge de una estrecha convivencia que se ha visto modificada por el desarrollo y la urbanización, resultando en diversas modalidades de vínculo entre las personas y los caninos”.

Según el mismo texto, tiene “relevancia para la salud pública debido a las múltiples consecuencias que puede traer, no sólo las relacionadas con las enfermedades zoonóticas graves como la rabia sino, en especial, por las lesiones de diferente gravedad con posibles secuelas incluida la muerte, daño psicológico, impacto social y costos económicos diversos”, aportan al respecto.
También se refieren a los números asociados a estas lesiones. “En Estados Unidos, por ejemplo, cada año sufren mordeduras de perro alrededor de 4,5 millones de personas. De estas, casi 885.000 recurren a asistencia médica; 30.000 se someten a procedimientos reconstructivos; entre el 3% y el 18% contraen infecciones, y se producen entre 10 y 20 fallecimientos”, advierten.
“En otros países de altos ingresos, como Australia, Canadá y Francia, las tasas de incidencia y letalidad son comparables. En España, los niños menores de 14 años presentan un riesgo 4 veces mayor que los otros grupos etarios”, agregan.
Hay menos información disponible en Argentina. En el Boletín de la semana 20 precisan que, “según los datos surgidos del Sistema de Vigilancia de Lesiones a través de sus unidades centinela, fueron atendidos 6.245 personas por mordedura de perro entre 2004 a 2014”.

Y que “el principal grupo etario afectado es el de niños entre 5 y 9 años. Las lesiones descriptas varían en gravedad desde simples excoriaciones hasta politraumatismos graves”.
A su vez, citan cifras locales de la Dirección de Estadísticas e Información de Salud (DEIS), del período 2005 y 2011, en el que registraron 7.481 egresos por mordeduras de perros, representando cinco egresos por esta causa cada 10.000 del total.
“En el 60% de los casos los afectados fueron varones, presentando la mayor concentración de casos los menores de 5 años. El 50% de los afectados estuvieron al menos dos días internados. En cuanto a la gravedad del evento, entre el 23% y el 37% requirió intervención quirúrgica. Asimismo, según los registros de mortalidad de la DEIS, en ese mismo período se reportaron 38 muertes”, suman.

Los objetivos de esta vigilancia, según la misma fuente, son “estimar la magnitud del evento e identificar a poblaciones afectadas, caracterizar epidemiológicamente los casos graves y muertes como consecuencia de estas lesiones y al agente agresor y las circunstancias en las que se da el ataque”. También gestionar la información para “llevar adelante acciones de seguimiento”.
La mirada de expertos
Angela Nakab, pediatra del Hospital Pedro de Elizalde, dice que “es importante que se lo considere un tema de salud pública porque es una lesión relativamente frecuente”.
Sostiene que las posibilidades de infección por este tipo de mordeduras son bajas, de entre un 5% y un 15%: “En niños grandes y adolescentes, las heridas suelen registrarse en brazos y piernas mientras que en los más pequeños y lactantes, en la cara o el cuello”.
“Hay que analizar también si se trató de un accidente en el marco de un juego o si el perro mordió al niño sin ninguna interacción previa para evaluar un posible caso de rabia”, comenta Nakab.

El procedimiento, ante la mordedura, es lavar bien la herida con agua y jabón lo antes posible y visitar una guardia. “Si la lesión es en brazos o piernas, hay que elevar el miembro dañado e inmovilizarlo”, agrega.
Es clave saber si la persona mordida recibió su vacunación antitetánica o si tiene que repetirla y, en los casos en los que el perro sea desconocido o no cuente con su carnet de vacunación para confirmar que tenga las aplicaciones antirrábicas correspondientes, el afectado deberá iniciar un plan de vacunación antirrábica, según la pediatra.
Liliana Papalia, que es médica clínica, señala que más allá de la vacunación y las medidas de profilaxis ante el riesgo de infección, en muchos casos se requiere un tratamiento con antibióticos.
Coincide en que resulta fundamental limpiar bien la herida y que puede que sea necesario suturar. Además, es posible que la persona tenga que quedar internada, depende de si la herida es superficial o si generó daños en músculos, tendones, por ejemplo, lastimó el rostro del paciente.
Ramiro Heredia, médico clínico del Hospital de Clínicas José de San Martín, concuerda en que “es un evento de relevancia para la salud pública”.
“Siempre los profesionales de la salud tenemos que denunciar la situación a las autoridades sanitarias, detallando en qué condiciones se produjo y haciendo referencia a la sanidad del animal, las lesiones ocasionadas, así como los tratamientos instaurados y el seguimiento del caso”, cuenta.
Las mordeduras se relacionan “con lesiones traumáticas, infecciones bacterianas y enfermedades zoonóticas graves, como la rabia”, resalta.
Riesgo de contraer rabia
“La rabia es una enfermedad viral prevenible mediante la vacunación, que afecta a más de 150 países y provoca decenas de miles de muertes al año, principalmente en Asia y África”, destaca Heredia.
“En el 99% de los casos de transmisión a los humanos, la enfermedad es contagiada por perros. Por eso, se puede prevenir vacunándolos. Si se cree que se ha recibido una mordedura de un animal rabioso, se deben aplicar medidas profilácticas. Hay que lavar de inmediato y a fondo la herida con agua y jabón durante 15 minutos, aplicar una serie de vacunas antirrábicas, y administrar inmunoglobulinas antirrábicas”, explica.
Los perros y la vacunación
En tanto, el veterinario Walter Pérez señala que los perros deben recibir su primera vacuna antirrábica a los tres meses de vida y que hay que repetir la aplicación anualmente.
“El dueño va a recibir un certificado de vacunación antirrábica que tendrá que mostrar en caso de que su mascota muerda a otro animal o a una persona”, asegura Pérez.
Y agrega: “Independientemente de esto, durante los 10 días siguientes a la mordedura, el veterinario debe hacer un control antirrábico al animal para confirmar que no esté enfermo”.
Te sugerimos
Sociedad
Once días atado, racismo y un dedo amputado: el brutal secuestro que reveló un nuevo perfil criminal en la Argentina
Publicado
17 horas atráson
16 octubre, 2025Por
Admin
Ariel Strajman tenía 27 años cuando fue raptado mientras entraba al garaje de su edificio en Villa Urquiza. Su caso marcó un cambio del mapa delictivo: bandas sin prontuario, de jóvenes de barrios acomodados con una crueldad metódica. A más de veinte años, su historia sigue siendo un espejo incómodo de la violencia de aquellos años. El encuentro a solas con él a la distancia
“Si a Maradona le cortaron las piernas en el Mundial de Estados Unidos, a mí me arrancaron el corazón, la mente, todo”, me confió en la única entrevista que dio Ariel Strajman, sentado en el living del departamento de su familia en Villa Urquiza, casi un par de años después de que una banda improvisada pero feroz lo secuestrara y le amputara el dedo meñique de su mano derecha para cobrar el rescate.
Estaba triste, pero firme y con mucha bronca acumulada: “Pedí pena de muerte y al cabecilla le dieron 22 años. ¿Qué diferencia, no? Estas cosas incentivan para irse del país. Después de saber el veredicto quedé arruinado. Me cortaron un dedo y me anunciaron que después venía la mano. Y que me despedazarían lentamente, mientras me llamaban ‘judío de mierda’ y se reían. Después me quemaron el pecho y los labios con encendedores y me colocaban jamón en la boca y me daban alcohol para emborracharme. Estaba atado de pies y manos, me dieron pastillas de Lexotanil para dormir. En el juicio aseguraron que no hicieron nada de eso. Y Adrián Sommaruga se solidarizó con mi familia en el debate oral. Ahí me paré y me fui a la mierda, para no armar un quilombo y terminar preso yo. Sentí que en ese fallo se me fue la vida y el futuro”.

Las frases no fueron en caliente, sino en una charla en la que intentó poner en palabras el hueco que dejó aquel rapto que lo convirtió, sin quererlo, en símbolo de una época de violencia social contenida. Su historia, como la de tantos otros secuestros exprés de comienzos de los 2000, mezcló juventud, impunidad y un nivel de planificación que asombró incluso a los investigadores más experimentados, más allá de los errores garrafales que los delincuentes cometieron.
Ocurrió el 16 de octubre de ese año. Strajman, de 27 años, empresario, hijo de joyero, llegaba a su departamento. Fue interceptado por un grupo armado que lo subió a un auto y lo trasladó hasta una casa cercana ubicada en la calle Holmberg, que luego se comprobó era de la familia Sommaruga, de donde provenían la mayoría de los componentes de la banda. A patadas y empujones le hicieron bajar una escalera resbalando en cada peldaño hasta un sótano donde lo ataron tan fuerte que apenas podía respirar.
Lo encadenaron de pies y manos. Después lo llevaron a otra vivienda en el Complejo La Josefina, en la esquina de Tulipanes y Las Glicinas en la ciudad de Pilar, lugar donde lo mantuvieron encerrado y lograron cobrar un primer rescate, algo así como mil dólares, seiscientos pesos y alhajas. Y como les salió bien intentaron pedir más dinero.

Durante los días siguientes, lo golpearon, lo humillaron y, para demostrarle a su familia que hablaban en serio, le cortaron el dedo meñique de la mano derecha. Esa imagen dentro de una bolsa la recibió su familia exigiendo un rescate de 30 mil dólares, y luego recorrió oficinas policiales, redacciones y despachos judiciales. Era el símbolo de una crueldad que ya no tenía fronteras de clase. “Esto que vas a sufrir no se compara ni con el Holocausto”, lo torturaban.
Las llamadas eran constantes, con tono burlón y precisión militar. Algunos trabajaban como patovicas en boliches de la zona norte, otros estudiaban carreras universitarias. Su presunto líder, Pablo Sommaruga, había sido custodio en locales nocturnos y mantenía contactos con el ambiente del fisicoculturismo. Los investigadores descubrieron que no se trataba de una banda común: no había delincuentes históricos, sino una mezcla de soberbia y amateurismo que, en conjunto, resultó devastadora.
El secuestro duró once días. Ariel fue liberado tras el pago de un rescate parcial y un operativo encubierto de la Policía Federal. Llegó al hospital deshidratado, con el cuerpo lleno de hematomas y la mano. “No sé cómo voy a volver a dormir”, reflexionó mirando al piso. Los médicos le explicaron que el dedo no se podía reimplantar, tampoco la vida anterior.
La investigación fue un rompecabezas. Los secuestradores habían dejado rastros en los teléfonos, en las cabinas y hasta en los billetes del rescate. Cayeron uno a uno. Cuando se conocieron sus identidades, la sorpresa fue general: jóvenes de entre 25 y 35 años, sin antecedentes, con buen aspecto y vínculos sociales. Los medios los bautizaron como “La banda de los patovicas”, aunque en el expediente figuran como una “asociación ilícita dedicada al secuestro extorsivo”.
Venían cometiendo delitos en la zona aledaña de Saavedra y Villa Urquiza. Pero la sensación de impunidad con que se movían los llevó a cometer errores, algunos garrafales, como utilizar el mismo teléfono para hacer las llamadas para pedir las sumas de los rescates, por lo que rápidamente se identificó el número de un celular, a través del cual se obtuvieron los datos del titular de la línea.

De esa forma sencilla la policía llegó a la casa de la calle Holmberg donde al principio tuvieron a Strajman. Atendió María Esther Gottig, esposa de Alberto Juan Sommaruga, propietarios de la vivienda y reconoció que el teléfono le pertenecía. Pero la embarró más aún cuando intentó aclarar y mencionó que su hijo lo utilizaba para “trabajar”. Terminó detenida junto a su marido y sus hijos, Adrián y Pablo, y el resto de los sospechosos, uno de ellos llamado Diego Sibio –hijo solo de Gottig- y otros que no pertenecían a la familia.
La policía ordenó cuidadosos allanamientos. Uno fue clave para llegar a la vivienda de Pilar y poder liberar a Ariel Strajman. En otros pudieron secuestrar dos pistolas calibre nueve milímetros, otra 11.25, un revólver Magnum 357, un 32 con numeración adulterada y una ametralladora Mini Uzi automática de fabricación israelí.
Todos fueron imputados desde el comienzo por los delitos de “secuestro extorsivo, asociación ilícita, tormentos, con el agravante de odio racial, lesiones gravísimas, uso de documento de identidad falsificado y tenencia ilegal de armas de guerra”. María Esther Gottig fue alojada en la cárcel de mujeres de Ezeiza y los hombres en el penal de Villa Devoto. Dos años más tarde, la última semana de setiembre de 2004, el Tribunal Oral Federal Nº 1 que por entonces estaba integrado por Mario Gustavo Costa, Martín Federico y Jorge Gettas dictó sentencia: 22 años de prisión para Adrián Sommaruga; 16 para su hermano Pablo; 14 para Osvaldo Keroa; seis para María Esther Gottig; cinco para Alberto Sommaruga y Diego Sibio; y tres para Nicolás Barlaro.
Durante el juicio, el contraste entre la víctima y los acusados fue brutal. Ariel, de traje oscuro y voz temblorosa, describía las noches sin luz, los insultos, el dolor. Del otro lado, los imputados se mostraban serenos, casi altivos. En sus declaraciones, ninguno mostró arrepentimiento real.
La justicia los calificó como una organización “que actuó con extrema frialdad y desprecio por la vida humana”. El caso fue emblemático porque marcó un cambio en el mapa criminal argentino. Ya no eran bandas marginales las que secuestraban, sino grupos con educación, contactos y ambición económica. Los investigadores compararon su estructura y su método con aquellos secuestros familiares de los ochenta que habían conmocionado a la sociedad, aunque esta vez sin la solemnidad de un clan ni la mística de un apellido como el de los Puccio, por ejemplo. Era el reflejo de un tiempo en el que todo parecía posible, incluso lo impensado.
Para Ariel las noches seguían siendo un campo minado. En 2020, el apellido Sommaruga volvió a escena: Pablo, con la condena ya cumplida por el secuestro de Strajman, vivió un acto de agresión mientras gozaba de salidas transitorias de la Unidad 14 de Esquel en una causa por portación de armas. Sucedió en las inmediaciones del barrio Vepam cuando vecinos lo increparon y lo golpearon.
En ámbitos judiciales los fiscales aún recuerdan la causa como una de las más complejas de la década. No por su extensión, sino por su impacto emocional. “Ariel fue un testigo de excepción —dijo uno de ellos años después—. No solo narró su cautiverio, también nos obligó a mirar de frente una forma nueva de criminalidad”. El secuestro de Strajman se convirtió en un espejo difícil de mirar donde podía verse el sadismo más cruel.
Él mismo aceptó que no busca revancha, sino olvido. “No odio, pero no quiero ni recordarles la cara”. Y aunque los nombres de sus captores ya forman parte de un archivo judicial, el trauma persiste en él como una sombra imposible de soslayar.
Sociedad
Indignación y repudio por el disfraz de un alumno en Bariloche: se vistió de “mujer violada” en su viaje de egresados
Publicado
19 horas atráson
16 octubre, 2025Por
Admin
El grupo de jóvenes de Bell Ville difundió el video a través de la cuenta de Instagram de la promoción. Allí, uno de ellos aparece con un vestido estampado roto y el cuerpo pintado con manchas rojas
Un grupo de estudiantes del Instituto Provincial de Educación Técnica (IPET) N.º 267 de la localidad de Bell Ville, en la provincia de Córdoba, protagonizó un repudiable hecho durante su viaje de egresados, cuando uno de ellos fue grabado usando un disfraz en el que simulaba ser una víctima de abuso sexual. El video, difundido inicialmente en la cuenta de Instagram de la promoción, se viralizó y provocó un fuerte rechazo social por trivializar el tema.
Según informó el medio local El Doce, la rápida difusión del video motivó pedidos de sanción y un fuerte repudio por parte de la comunidad educativa y de la sociedad en general.
En el mensaje, los alumnos reconocieron: “Somos conscientes de la gravedad de lo sucedido. Queremos aclarar que este hecho está desligado de nuestra institución, acompañantes y no representa los valores enseñados. Somos adolescentes y entendemos que es un tema delicado y que no debemos fomentarlo. Pedimos disculpas”.

En sus palabras, los estudiantes afirmaron: “Queremos expresar nuestro más absoluto repudio por las recientes publicaciones. Nos sentimos totalmente conmocionados por la violencia de las imágenes y consideramos que el comunicado posterior resulta insuficiente para justificar lo sucedido”.
El texto de este segundo comunicado profundizó en la reflexión sobre el contexto social y la responsabilidad individual, al señalar: “La mayor parte de nosotros somos mayores de edad. Esto forma parte de una manera de mirar el mundo, de naturalizar las violencias contra nuestros cuerpos, de creer que algunos pocos tienen la licencia de reírse de cualquier cosa. Nos sentimos abrumados, tristes”.
Por último, solicitaron la intervención de las autoridades escolares para que se tomen medidas concretas. “Pedimos que se revisen y sancionen a los responsables, nos despegamos de ellos y abrazamos a nuestra escuela y docentes que nos están conteniendo en tan tremenda situación”, concluyeron.
Esta no es la primera vez en el año que un grupo de alumnos de una escuela que estaba en medio de su viaje de egresados en Bariloche queda envuelto en un hecho polémico. A finales de septiembre, unos estudiantes de una escuela de Canning fueron filmados mientras realizaban cánticos antisemitas.
“Hoy quemamos judíos”, era la frase que se repetía en el micro y que se puede escuchar en el video que se viralizó en las últimas horas. En las imágenes difundidas, se puede ver cómo un hombre, que sería el encargado del grupo, se sumó a los cánticos que generaron rechazo en las redes sociales.
De acuerdo con lo que se conoció hasta el momento, las imágenes datan del pasado 10 de septiembre, cuando en Bariloche estaban los alumnos de la Escuela Humanos de Canning.
En ese marco, la propia institución educativa sacó un comunicado haciendo alusión a lo ocurrido. Allí señalaron que “la Escuela Humanos repudia enérgicamente el accionar de un grupo de alumnos durante su viaje de egresados”.
“De igual manera, repudiamos la actitud de la empresa organizadora y del coordinador a cargo, aclarando que nuestra institución no tiene vínculo alguno con sus prácticas ni mensajes”, continúa el escrito.
Y cierra: “Los cánticos difundidos no representan en absoluto los valores de nuestra escuela, basada en el respeto, la inclusión y la convivencia democrática. Se adoptarán las medidas correspondientes y reafirmamos nuestro compromiso de seguir construyendo una comunidad más humana e inclusiva”.
En sus redes sociales, la escuela destaca que desde 2019 lleva el título de Embajadores Mundiales de la Paz. Esta distinción fue entregada por la agrupación Mil Milenios de Paz en un acto que se realizó en el Senado de la Nación.
Sociedad
Aerolíneas Argentinas retiró preventivamente ocho aviones tras la falla en el vuelo con destino a Córdoba
Publicado
19 horas atráson
16 octubre, 2025Por
Admin
La compañía investiga, junto al fabricante CFM y a otras aerolíneas de la región, el origen del desperfecto en uno de los motores del Boeing 737-800 que debió aterrizar en Ezeiza de emergencia
Aerolíneas Argentinas anunció este jueves la suspensión preventiva de las operaciones de ocho aeronaves Boeing 737-800 equipadas con motores fabricados por CFM, tras la falla registrada en el vuelo AR1526 que partió ayer desde Aeroparque con destino a Córdoba. “El foco de la medida está puesto en los propulsores, y no en otro elemento de las aeronaves”, informaron.
Como informó este medio, el vuelo AR1526 presentó una falla técnica en uno de sus motores poco después de iniciar el despegue. La tripulación siguió los procedimientos de seguridad y dirigió la aeronave al Aeropuerto Internacional de Ezeiza, donde aterrizó sin inconvenientes. “Los pasajeros desembarcaron con total normalidad”, señaló la línea aérea.

La compañía informó que el mantenimiento de todos sus motores “tiene un cumplimiento absoluto en términos de las verificaciones indicadas por los fabricantes”. Sin embargo, reconoció que “este es el cuarto suceso registrado en el último año con un mismo tipo de motor”.
También pidió la evaluación de otras aerolíneas de la región que operan con la misma motorización y “tuvieron sucesos similares”. Además, notificó a las autoridades regulatorias locales, con las que trabaja “para fijar un criterio de resolución”.
“Esta suspensión preventiva es consecuencia de la aplicación de criterios de altísima exigencia”, subrayó la empresa. “El foco de la medida está puesto en los propulsores, y no en otro elemento de las aeronaves”, aclaró el texto oficial.
El incidente del miércoles afectó a más de 160 pasajeros del vuelo AR1526 de Aerolíneas Argentinas, que habían despegado ayer por la mañana del Aeroparque Jorge Newbery, en CABA, con destino a la ciudad de Córdoba. Allí, un motor del avión sufrió una falla y debió modificar su ruta inicial hacia el Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini, en Ezeiza, donde aterrizó sin inconvenientes.

Como consecuencia del hecho, la terminal aérea metropolitana permaneció cerrada durante algunas horas, hasta que, pasadas las 11.30, reabrió sus puertas y reanudó sus actividades habituales. No obstante, algunos vuelos programados para esta jornada registraron demoras y reprogramaciones menores.
Fuentes de la aerolínea señalaron que “el motor estaba en condiciones normales y correctamente mantenido”. Tras la inspección de pista, el fabricante fue informado sobre la incidencia con el objetivo de determinar el origen de la falla.
El Boeing 737-800 fue liberado luego de que los operarios completaron las tareas de revisión y limpieza en la pista. La empresa precisó que la medida preventiva no implica la cancelación de rutas, pero sí “una reorganización temporal de la programación de vuelos mientras duren las verificaciones técnicas”.
Aerolíneas indicó que continúa en contacto con el equipo técnico del fabricante CFM y con las autoridades aeronáuticas locales e internacionales “para definir los pasos a seguir antes de reincorporar las aeronaves al servicio”.


Dólar hoy en vivo: a cuánto se operan todas las cotizaciones minuto a minuto este jueves 16 de octubre

Coloquio de IDEA: uno de los ejecutivos top de Mercado Libre y una receta con 3 claves para que las empresas innoven bien en IA

La Cámara Electoral ordenó reimprimir los afiches de candidatos, con Diego Santilli y sin Espert en la lista de La Libertad Avanza

Increíble hallazgo cerca de Punta del Este: encontraron la especie de tortuga más grande del mundo

La inflación anual de Estados Unidos trepó a 8,6% en mayo y es la más alta en 40 años

Mientras cumple prisión perpetua, Alan Schlenker, ex líder de la barra de River, sacó el vino de Los Borrachos del Tablón

Argentina derrotó 1-0 a Colombia y jugará la final del Mundial Sub 20 después de 18 años

El embajador Alec Oxenford confirmó que próximamente se anunciará un acuerdo comercial “muy importante” entre Estados Unidos y Argentina

La advertencia de Trump sobre la vigencia de su respaldo al gobierno convulsionó la gira de Milei por EEUU
Mas Leidas
-
Policiales4 días atrás
Un testigo del doble femicidio en Córdoba brindó detalles estremecedores del accionar de Pablo Laurta el día del hecho
-
Economia4 días atrás
Presupuesto 2026: arranca el debate, con proyecciones cuestionadas
-
Sociedad4 días atrás
Un adolescente fue detenido por el crimen de una chica de 14 años en una fiesta clandestina en Quilmes
-
Politica4 días atrás
Javier Milei hace una pausa la política local para reunirse con Trump y a su regreso cerrará la campaña en Córdoba
-
Salud4 días atrás
Advierten que la Tierra alcanzó el primer “punto de inflexión climático” global por la desaparición de los arrecifes de coral
-
Internacionales4 días atrás
Las primeras imágenes de los 20 rehenes israelíes vivos liberados por Hamas
-
Economia3 días atrás
El particular apodo de la prensa europea a Franco Colapinto que fue furor en redes: la reacción de su manager
-
Economia4 días atrás
Cuáles fueron los destinos más elegidos durante el fin de semana largo